La policía comunicaba este miércoles la detención tres personas por mantener encadenado a un hombre en su piso de Torrejón de Ardoz. Finalmente, se conocía que los detenidos eran los hijos del mismo y la pareja de uno de ellos. Estos han dado su versión y defienden que fue su propio padre el que se lo pidió.
Cuando la policía entró en la vivienda, los detenidos habrían admitido que lo habían dejado atado a la pared de una habitación. El hombre fue encontrado con una cadena de hierro en el tobillo cerrada con un candado. Los agentes los acusan de un delito de detención ilegal.
Pero ellos niegan tajantemente que quisieran retenerlo a la fuerza y ni mucho menos que quisieran hacerle daño. "En ningún momento ha habido agresiones, ni un secuestro ni detención ilegal", afirmaba uno de los acusados en La Sexta. Tanto es así que no dudaron en mostrar la habitación donde supuestamente habrían retenido a su padre.
Su versión de los hechos difiere en mucho de lo que explicaba un comunicado policial. El Cuerpo Nacional de Policía defiende que no fue una situación puntual y que se trataba claramente de un secuestro. En cambio, ellos siguen insistiendo en que es su propio padre el que les pide que lo aten de esa manera.
El hombre dijo a la policía estuvo encadenado durante días
El hombre que fue encadenado habría explicado ante la policía que habría estado durante días. Él estimaba que al menos había estado ocho días con una cadena y que no le dejaban salir de la habitación. Pero no esto lo que aseguraban sus hijos.
Por el contrario, ellos insisten en que estuvo muy poco tiempo en esas condiciones. Lo que decía uno de los dos hijos al medio citado es que apenas había estado encadenado un par de horas. Y seguía defendiendo que no había sido idea suya sino del propio afectado.
El motivo que le había llevado a hacer esa petición es su problema de drogadicción. Les habría solicitado que lo ataran, ya que es la única manera de evitar que acabará consumiendo. "Nos dijo 'atadme hasta que se me pase el mono'", explicaba el otro hijo del hombre encadenado.
Según este, su padre es drogodependiente desde hace 35 años. "En cuanto se toma la medicación se le pasa y vuelve a ser una persona normal", afirmaba. Y se quejaba de que los servicios sociales no les atienden y solo les ponen en lista de espera.
La Concejalía de Bienestar Social confirmaba que no sabía nada de la situación límite de este hombre. Solo le habrían dado asistencia hace unos meses. Estarían tratando ya de ingresarlo de forma permanente en un centro para toxicómanos.
Los detuvieron después de que el hombre pidiera ayuda por una ventana
Aunque se dieran a conocer esta semana, los hechos tuvieron lugar a principios del mes de julio. Fue entonces cuando el hombre pudo pedir socorro a los vecinos a través de una ventana. Los vecinos alertaron a la Policía Nacional sobre que un hombre pedía ayuda por una ventana diciendo que había sido secuestrado.
De manera inmediata, se activó un dispositivo policial para ver que era lo que estaba ocurriendo en el piso. Varios agentes se personaron en el mismo y se encontraron allí al hombre y a sus hijos. Estos confesaron que lo habían dejado atado en una habitación porque sufría problemas mentales.
Lo que se encontraron los agentes fue una habitación en condiciones insalubres y solo con un colchón en el suelo. El hombre recibió atención médica y fue trasladado Hospital Universitario de Torrejón de Ardoz. Los tres detenidos ya han pasado a disposición judicial.