Eitan es el niño de 5 años que ha sobrevivido al accidente de teleférico que este domingo sobrecogió a todo el mundo. En ese terrible suceso, Eitan perdió a sus dos padres, a un hermano más pequeño y a sus bisabuelos mientras él lucha por su vida mientras está ingresado, en estado crítico, en el hospital.
El pequeño estaba junto a gran parte de su familia en ese teleférico que ha acabado costándole la vida a sus seres queridos, pero no era el único niño a bordo. En la cabina viajaba también Tom, su hermano pequeño, y Mattia, un niño al que no conocía de nada, pero que también vio truncada su vida por el accidente.
Curiosamente, los dos supervivientes iniciales del accidente fueron Eitan y Mattia, dos niños, probablemente porque salieron despedidos de la cabina y evitaron el choque que destrozó el teleférico cuando se encontró de frente con varios árboles mientras rodaba colina abajo.
Al salir despedidos, los dos menores evitaron el golpe más fuerte y consiguieron sobrevivir, aunque poco después Mattia acabaría falleciendo como consecuencia del estado en el que estaba, sufriendo un fallo cardíaco en el hospital.
Los servicios de emergencias encontraron a los dos niños cerca de la cabina, tendidos sobre el suelo, pero todavía respirando. Ambos fueron trasladados al hospital Regina Margherita (Reina Margarita) de Turín, pero al no tener documentación encima, fueron tratados como «pacientes desconocidos».
A Mattia no pudieron operarle a su llegada al hospital porque tenía varios traumatismos en el cráneo y el tórax y su corazón había sufrido varias paradas cuando llegó al centro, así que su estado impedía la operación y los médicos tuvieron que mantenerle en observación, esperando que su condición mejorase para poder intervenirlo. Horas después, el director general de la Ciudad de la Salud de Turín, Giovanni La Valle, anunció la muerte del niño a pesar «de los enormes esfuerzos realizados».
Eitan, en cambio, presentaba un estado algo más favorable que sí permitió que los médicos le interviniesen, aunque necesitaron sedarlo porque el niño no paraba de gritar: «Déjadme en paz, tengo miedo, ¿dónde está mi mamá?». Horas después, su estado es reservado, aunque según ha trascendido, los médicos todavía temen por su vida.
La tragedia sacude a dos familias
Tras la muerte de Mattia, todos los familiares que iban con él a bordo de ese teleférico perdieron la vida, sumiendo a su familia en un dolor indescriptible que tardarán tiempo en poder superar. Él era el más pequeño, y junto a él viajaban su madre, Elisabetta, de 37 años; y su padre, Vittorio, de 54; todos ellos procedentes de Vedano Olona.
La otra familia, la de Eitan, ha sufrido un golpe más duro porque han fallecido muchos más miembros. Su padre, Amit, tenía 30 años y era de origen israelí, aunque vivía en Italia porque fue en ese país donde acabó sus estudios de medicina. Poco más tarde llegaría su esposa, Tal, de 27 años, y poco después, y se acabaron de asentar en Pavia con el nacimiento del pequeño Tomer, al que llamaban cariñosamente como Tom.
Junto a ellos viajaban los bisabuelos de los dos niños, que también fallecieron en el accidente. Tras conocer la noticia, la tía de Eitan se trasladó hasta Turín para estar con él.
Stefano Disegni, presidente de la comunidad judía de Turín, lamentó los hechos a través de un comunicado: «Esta es una gran tragedia que sigue a otros eventos lamentables, incluida la guerra, que en los últimos tiempos ha estado afectando a los ciudadanos israelíes». Añadió también que «intentaremos brindar la máxima asistencia a la familia del niño y rezaremos por él para que pueda salvarse. Estamos con todas las víctimas de esta terrible desgracia».