Macarena Díaz, la madre de David, el niño desaparecido en Sevilla, reconstruyó en un papel sus recuerdos del lugar donde abandonó el cuerpo de su hijo. David es un menor discapacitado de 15 años y esto sucedió hace dos meses.
Mientras, la policía busca el cuerpo del niño y su madre, que sufre trastorno bipolar, está en libertad provisional en su casa familiar de Morón (Sevilla).
El dibujo hecho por la mujer mientras estaba ingresada en la unidad psiquiátrica del hospital de Segovia enseña una carretera y un giro a la derecha. La mujer anota la palabra 'duque'. A la izquierda de la carretera, la madre del niño desaparecido dibuja un hotel y un edificio.
El dibujo de Macarena sobre sus recuerdos
También asegura que hay un descampado y dibuja el contenedor de basura, de color gris, donde habría tirado el cuerpo de su hijo. Además, la mujer escribe el nombre del crío, David. En la zona superior, la mujer dibuja una caravana y escribe 'reposabrazos'.
En la parte superior del dibujo, Macarena escribe: "Salgo de este pueblo, continúo una hora más o menos. Entro en otro pueblo y dejo el carro", en relación a la silla de ruedas de su hijo, que no ha aparecido.
"Termino a las 17:40. Creo que esta es mi información más completa durante el día de hoy". En su declaración, Macarena contaría que dejó la silla de ruedas en un aparcamiento en batería y la silla tampoco ha aparecido.
En su declaración ante la policía, Macarena contó que "yo no quise dejar a mi hijo en el contenedor, pero no sabía qué hacer". La mujer afirma que el pasado 12 de septiembre salió con David ya fallecido de su casa en Morón.
"Sentí el deseo de contar lo que había pasado"
Tras el viaje, con parada en un hotel de Talavera de la Reina (Toledo), Macarena aseguró que había pasado por Arroyomolinos, Navalcarnero y Alcorcón. Esta habría dejado el cuerpo de David en un contenedor gris de basura entre Alcorcón y la entrada de Madrid.
Después de arrojar el cadáver, Macarena solo se acuerda que "pasé unos túneles" y llegó a la gasolinera de Carabias (Segovia). "Sentí el deseo de contar lo que había pasado". Se lo contó a una empleada de la gasolinera, que avisó de forma inmediata a emergencias.
Macarena fue diagnosticada de trastorno bipolar y tenía ayuda de los servicios sociales para cuidar a su hijo David. En sus declaraciones, la madre de David afirmó que parte de su familia quería envenenarla y drogarla.
En un primer término, esta dijo que había matado a su hijo inyectándole una jeringuilla con agua. Después, que David murió en su casa a causa de la fiebre. Por si fuera poco, la mujer había experimentado una gran conversión religiosa e iba cada día a la iglesia.
La ayuda del párroco para hacer que Macarena recordase lo sucedido
Los investigadores del caso de David llevaron a un párroco de su pueblo para pedirle que bendijera su casa. Lo llevaron hasta la cama del hospital donde estaba ingresada Macarena para tratar de que la mujer recordara algo de lo ocurrido, aunque fue en vano.
Además de intentar saber más de los recuerdos de la madre de David, los investigadores han rastreado las cámaras de seguridad. También ha reconstruido el recorrido que llevó a cabo desde que salió de su casa hasta que llegó a la gasolinera de Carabias.
Así, han sabido que Macarena pasó sin su hijo por un hotel de Riaza antes de acabar en la gasolinera, lo que daría la razón a su historia.
Bien es cierto que ella había dicho que el pueblo donde estuvo se llamaba Izan, un lugar que se inventó.
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