Se acabaron los anuncios de mascarillas en internet, y la razón ha causado polémica. Y es que los gigantes del sector los han prohibido esta publicidad para evitar que los fabricantes se aprovechen de una situación de emergencia y salud pública, a pesar de que muchos creen que precisamente la empresa privada puede ayudar mucho a superar crisis.
El día 9 de marzo, Facebook decidió eliminar cualquier anuncio de mascarillas y el jefe de producto de la compañía, Rob Leathern, lo justificó con un mensaje a través de Facebook: «Vigilaremos de cerca todo lo relacionado con el Covid-19 y actualizaremos nuestras normas si vemos que la gente trata de sacar provecho de esta emergencia de salud pública».
Google Ads siguió sus pasos dos días después. Pero no tuvieron en cuenta el escenario en el que se vieron envueltos países como España, el 20 de mayo, cuando se impuso el uso obligatorio de mascarillas por la situación epidemiológica. Compañías como Kumundo han denunciado la situación de indefensión vivida esos meses.
Entonces las empresas proveedoras se vieron con la imposibilidad de difundir información de calidad y contrastada según los códigos que establece el ministerio de Sanidad. La reacción fue el «hazlo tú mismo» y las redes sociales se impregnaron de fotografías de mascarillas caseras, las cuales no atendían a ninguna normativa ni filtro de seguridad.
Sin embargo, estas publicaciones de la población activa no tuvieron ningún impedimento para crecer en las redes sociales gracias a su difusión masiva. Tratar la promoción de mascarillas como un tema tabú también incitó a debates radicales y severas críticas de los usuarios en respuesta a su publicitación, considerándola un derecho y no para provecho de la privada.
En aquel momento el BOE declaró la obligatoriedad de la mascarilla del mismo modo en el que indicaba que cada uno debía abastecerse con sus propios recursos. Si el Estado no se hacía cargo entonces del suministro de mascarillas, ¿en qué lugar quedaba la empresa privada cuando puso por delante la inversión y los recursos para abastecer a la población?
Nuevas condiciones
Después de un tiempo en la que la situación cambió radicalmente, Facebook volvió a permitir la promoción de los anuncios continuando con fuertes restricciones a pesar de la estabilización en los precios de las mascarillas y considerando que en su fabricación se han implicado muchas empresas.
Los anuncios son admitidos siempre que no se relacionen los mensajes publicitarios con la prevención y la salud. Facebook también exige que estas empresas tengan un histórico de cuatro meses en inversión publicitaria para otros productos.
Ahora, muchas personas se preguntan por la necesidad de estas restricciones en cuanto a la promoción y si es demasiado tarde como para el usuario en redes sociales perciba con normalidad un anuncio de mascarillas, o ya se ha dañado irreversiblemente su percepción en cuanto al producto.