Las últimas horas han sido frenéticas en Moncloa, pero con final feliz para el Gobierno, que consigue atar el apoyo de Ciudadanos para la aprobación de la prórroga del estado de alarma y espera también el beneplácito del PNV. Pero Pedro Sánchez ya conoce también el precio que tendrá que pagar para ganarse el apoyo de los vascos: «Se ha acabado el mando único».
Con estas palabras se ha expresado el portavoz de los nacionalistas vascos, Aitor Esteban, que celebra el acuerdo alcanzado por Ciudadanos, Coalición Canaria y los socios de Gobierno, aunque considera «terrible» el trato del presidente a las comunidades autónomas y confía en que a partir de ahora se facilitará la negociación bilateral en las medidas de desescalada.
El acuerdo para desbloquear la votación de la aprobación del estado de alarma, que pendía de un hilo tras la negativa de ERC y el viraje de última hora del PP hacia la abstención o el «no», ha llegado esta manaña con el acuerdo entre Gobierno y PNV e incluye la negocación de las medidas a adoptar entre el ejecutivo y las comunidades autónomas. Por eso, los nacionalistas vascos dan por finiquitado el mando único.
Y es que no solamente piden al Gobierno que abandone la política de unilateralidad que ha llevado a cabo hasta ahora, sino que exige que presidentes autónomicos como el vasco Iñigo Urkullu y el catalán Quim Torra tengan la capacidad de aplicar las medidas pactadas «como representantes ordinarios del Estado en el territorio» en la nueva fase de la lucha contra el Coronavirus.
Por su parte, con la aprobación del estado de alarma bien atada Moncloa espera en los próximos días recuperar la confianza tanto de ERC como del PNV, cuyas relaciones con el Gobierno se habían distanciado últimamente por la concentración de poder que asumió el ejecutivo en la gestión de la crisis. Los nacionalistas vascos hablan de «cogobernanza», un término que ahora el Gobierno también hace suyo.
Por eso el decreto del Consejo de Ministros para obtener el respaldo del congreso hace una mención específica a la negociación del Gobierno con las comunidades autónomas. Con ello, Pedro Sánchez sumará a los votos de la coalición de gobierno los de Ciudadanos, Más País, Compromís, Partido Regionalistas de Cantabria y Teruel Existe, lo que en total hacen un total de 170 «síes».
Al otro quedan los 75 «noes» confirmados de Vox, ERC, JxCat y la CUP, y los 88 votos del PP que, junto con sus aliados Foro Asturias y Navarra Suma, aún está por ver si se abstendrán o votaran en contra. En el bando de la abstención se encuentra EH Bildu y podrían añadirse Nueva Canaria y el PNV, que tanto si se abstiene como si vota afirmativamente está en la línea de facilitar la aprobación.
Por lo que respecta al apoyo de Ciudadanos, la formación naranja espera el mantenimiento de las ayudas socioeconómicas más allá de la vigencia del estado de alarma, e Inés Arrimadas ha hecho énfasis en la necesidad de modificar los reales decretos aprobados para que todas las ayudas puedan prolongarse durante más tiempo. Además, ha dicho, apoya la prórroga solo para el tiempo estrictamente necesario.