Para responder a las numerosas dudas creadas entre los ciudadanos sobre la posiblidad de contagiarse con los envases que venden en los supermercados, la Comisión Europea ha publicado una guía sobre seguridad alimentaria.
En este informe se remarca que «no se dispone actualmente de ninguna información sobre si el virus responsable del covid-19 puede estar presente en los alimentos, sobrevivir en ellos e infectar a personas. Sin embargo, a pesar de la gran magnitud de la pandemia del covid-19, hasta la fecha no se ha notificado transmisión alguna de esta enfermedad a través del consumo de alimentos», remarcan.
Además, la guía cita a la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria, que afirma que actualmente no existen pruebas de que los alimentos sean una fuente o una vía probable de transmisión del virus del covid-19 y que «se considera que el principal modo de transmisión es de persona a persona, principalmente a través de las gotículas respiratorias que producen las personas infectadas al estornudar, toser o exhalar», aseguran desde la AESA.
El covid-19 resiste varios días en acero y plásticos
Según la Comisión Europea, si es manifiesto que un estudio reciente «ha demostrado que el agente causal del covid-19 persiste durante 24 horas sobre el cartón y varios días en superficies duras, como el acero y los plásticos, en entornos experimentales no hay pruebas de que envases contaminados que han estado expuestos a condiciones y temperaturas diferentes transmitan la infección», apuntan.
Por el contrario, con la piel no sucede igual, ya que el virus puede pasar al sistema respiratorio al tocarse la cara y por eso «las personas que manipulan los envases, incluidos los consumidores, deben seguir las orientaciones de las autoridades de salud pública con respecto a las buenas prácticas de higiene, como lavarse las manos regular y eficazmente», aseveran.
La guía aconseja retirar el envoltorio antes de guardar el producto en casa
Entre los consejos básicos para evitar el contagio de coronavirus, es recomendable lavarse las manos con agua caliente y jabón antes y después de hacer la compra, retirar el embalaje exterior antes de guardar cada producto, lavar las frutas y hortalizas y evitar la contaminación de los utensilios de cocina lavándolos con detergente cuando se usen con un alimento distinto.
Finalmente, también incluyen en la guía la limpieza frecuente del frigorífico y las superficies de la cocina, además de cumplir las normas de cocinado de los alimentos, tanto el tiempo como la temperatura.