Cíntia Mariano Dias Cabral es el nombre de la mujer brasileña de 48 años que ha sido detenida estos días en Río de Janeiro. El motivo de su detención es que es la principal sospechosa de la muerte de su hijastra, Fernanda Carvalho. Y también de haber intentado matar al hermano de esta, Bruno.
Presuntamente, ella se pasó tiempo poniendo veneno en la comida que preparaba a estos jóvenes, de 22 y 16 años, hijos de su pareja.
Cíntia Mariano Dias Cabral, la convivencia en familia y el veneno
La brasileña comenzó una relación con un hombre, padre de dos hijos. Relación que les llevó a decidir vivir juntos en Río y en el último año estuvieron con ellos los vástagos de él. Aparentemente, han estado compartiendo casa en la zona oeste todos juntos y en perfecta y absoluta armonía.
Sin embargo, hace varias semanas, saltaron las alarmas y se empezó a sospechar que algo estaba pasando en este hogar. Todo sucedió cuando Fernanda empezó a sentirse mal y tuvo que ser trasladada al Hospital Albert Schweitzer. Hasta allí llegó presentando piel muy blanca, mareos, babeo e incluso teniendo la lengua torcida.
Al parecer, esta indisposición se produjo después de que comiera en casa un plato de frijoles. Y la situación empeoró cuando su hermano empezó a tener los mismos síntomas tras la mencionada ingesta. De ahí que este también tuviera que ser hospitalizado.
Cíntia Mariano es detenida
Las pruebas médicas que se les realizaron determinaron que los chicos tenían veneno en el cuerpo. Por este motivo, se activó el pertinente protocolo y se dio cuenta de lo sucedido a la policía. Esta inició una investigación y así fue que encontraron veneno para pulgas en la cocina familiar.
El caso se complicó porque la joven de 22 años, tras dos semanas ingresada, ha acabado falleciendo este pasado domingo. Mientras, su hermano, tras ser sometido a un lavado gástrico, continúa en el hospital bajo supervisión médica.
La mencionada muerte ha llevado a la detención provisional de Cíntia que, por el momento y según Informativos Telecinco, guarda silencio ante lo sucedido. Un silencio que tendrá que romper en el juicio que se ponga en marcha, pues está acusada de la muerte de su hijastra y de haber intentado matar a su hijastro.
Eso sí, según publica El Universal, parece que Cíntia sí confesó lo que había hecho a sus hijos biológicos.
La madre de los perjudicados pide justicia
Este trágico suceso ha provocado que toda la sociedad brasileña se encuentre conmocionada por lo acontecido. Pero quien más lo está es la madre de los dos jóvenes que han sido víctimas de su madrastra. Esta no ha dudado en utilizar las redes sociales para dar su testimonio y solicitar que se haga justicia.
Jane, que es como se llama, ha señalado en primer lugar la maldad de la acusada. Lo ha hecho diciendo: “Visitaba a mi hija en el hospital todos los días como si nada hubiera pasado. Y me abrazó en el funeral, aunque no parecía conmovida, pero hasta entonces pensaba que eran sus maneras”.
"No se llama ser humano a gente así, se llama monstruo".
Bajo la frase “Justicia para Fernanda y Bruno”, esta mujer ha pedido que se depuren responsabilidades y que Cíntia sea condenada. Lo ha hecho diciendo: “No hay lágrimas en tus ojos, hay sangre en sus ojos. Por código, para la justicia, por la victoria y por mi familia”.