La crónica de sucesos en España deja un capítulo trágico: un hombre de 49 años ha muerto apuñalado por su sobrino en el transcurso de una cena familiar. Los hechos sucedieron en Aldea Real (Segovia), la noche del lunes al martes.
Fue sobre las 10 de la noche, cuando en el transcurso de una cena familiar un joven de 27 años apuñaló a su tío. El centro de emergencias recibió una llamada en la que avisaban de que había un hombre herido en la calle Dos de Mayo.
En el lugar de los hechos tenía lugar una cena familiar. Uno de los invitados era el presunto autor de los hechos. El joven se encontraba de visita en casa de tus tíos, que normalmente viven en Segovia y que en ese momento se encontraban en su segunda residencia.
El sobrino se encontraba en el salón de la casa hablando con su tía y su primo, cuando de repente llegó su tío y se dirigió a la cocina. El chico se levantó y sin mediar palabra se dirigió hacia el hombre y le propinó cuatro puñaladas en el tórax.
Lo hizo con un cuchillo de grandes dimensiones, de unos veinte centímetros de hoja. El presunto autor huyó del lugar del crimen inmediatamente, y estuvo en paradero desconocido durante varias horas. Finalmente se entregó a la policía.
El presunto asesino se entregó
En la casa donde se celebraba la cena familiar, la escena causó una profunda conmoción. El hombre quedó tendido en el suelo bañado en sangre. Los familiares llamaron a emergencias, y una unidad sanitaria se trasladó hacia allí.
Una UVI móvil y personal del centro de salud más próximo intentaron reanimar a la víctima. Pero los intentos fueron en vano, y solo pudieron confirmar su muerte. El asesino propinó a su tío puñaladas profundas que le causaron la muerte casi instantánea.
Los familiares se quejaron de la tardanza de la unidad sanitaria que se desplazó hasta el domicilio. Dicen que tardó más de media hora, y que ese retraso pudo haber sido decisivo para la vida del hombre. La policía inició una investigación para esclarecer los hechos.
El presunto autor de los hechos, sobrino de la víctima, se entregó al día siguiente a la Guardia Civil. Fue sobre las una y media de la tarde, en la comisaría de la localidad de Veganzones. En un primer momento reconoció ser el autor material de los hechos.
Una riña durante la cena
La Guardia Civil puso en marcha una investigación para esclarecer la muerte del hombre. Los familiares aseguran que tío y sobrina tenían una buena relación. Según El Norte de Castilla, el crimen se propició por una riña durante la cena.
El crimen familiar ha causado una gran estupefacción en el entorno. Sobre todo en el pueblo de Aldea Real, de apenas 300 habitantes. No recuerdan un suceso parecido desde hace años, y menos con el agravante de parentesco que encierra este caso.
En el pequeño municipio segoviano no se habla de otra cosa. Según explican los vecinos, el fallecido era una persona tranquila que no se metía con nadie. Era además alguien muy conocido en la localidad, y todos tienen palabras de elogio hacia él.
La víctima es un hombre de 49 años, tiene dos hijos y trabajaba en un restaurante de la capital segoviana. El asesino es su sobrino, hijo de la hermana de su mujer. Una discusión durante la cena habría sido el detonante de la acción criminal.
Otro suceso hace 10 años
En el pueblo de la Aldea Real, el crimen ha reavivado el recuerdo de otro suceso trágico. Sucedió hace exactamente diez años, cuando un pastor apareció muerto con signos de violencia. El crimen vino también propiciado por una riña.
Asesino y víctima compartían la misma profesión, ya que los dos eran pastores. Desde hacía años, mantenían rencillas por cuestiones de pastoreo. Uno de ellos mató al otro a garrotazos y lo dejó medio enterrado en unos pinares.
La noticia corrió por el pueblo como la pólvora. El jurado lo consideró como un crimen con alevosía, ya que el pastor atacó a la víctima por la espalda. Sin embargo, tuvieron en cuenta los atenuantes de arrebato y confesión de los hechos.