La Dirección General de Salud Pública del Gobierno de Cantabria ha levantado el confinamiento en el edificio de la calle Nicolás Salmerón de Santander donde los vecinos llevaban más de diez días de encierro en casa por un brote de COVID-19, de manera que quienes han dado negativo en prueba PCR ya pueden salir.
En el día de ayer se hizo a los residentes de este edificio una nueva prueba PCR y se ha levantado la cuarentena a las personas que han dado negativo en coronavirus.
En este inmueble había 15 positivos en cuatro pisos de un total de 56.
Tras haber realizado la última prueba ayer no ha habido ningún caso positivo nuevo ni ninguna nueva vivienda afectada y por eso se da por concluido el aislamiento preventivo que se había impuesto a este bloque.
Se mantienen algunos casos sin síntomas y con PCR positiva a los que se mantiene el seguimiento epidemiológico y sanitario con los protocolos habituales, según explica la directora general de Salud Pública de Cantabria, Paloma Navas.
Desde que se detectó este brote se han realizado cerca de 500 pruebas PCR a vecinos de la calle o comerciantes, en el centro de salud cercano, y a contactos estrechos.
Los vecinos de este edificio de Nicolás Salmerón llevaban más de diez días confinados en sus domicilios tras detectarse el brote. Ayer se les sometió a la tercera prueba PCR, tras una primera de detección del virus y otra que se les hizo después.
Desde esta mañana a primera hora los médicos de cabecera han ido llamando a los vecinos que han dado negativo en la PCR y se les ha comunicado que ya pueden salir.
Y es lo que han hecho muchos de los residentes de este inmueble, que han aprovechado desde los primeros momentos tras recibir la llamada telefónica para salir a hacer recados, desayunar fuera, o simplemente dar un paseo para «estirar las piernas».
La directora general de Salud Pública dijo el viernes pasado que no se había podido determinar el origen del brote pero que la situación estaba "controlada" y que el edificio se había desinfectado.