El Covid-19 ha implementado una nueva forma de comprar en las tiendas. La distancia social y el aforo limitado empezarán a formar parte de nuestra vida cuando finalice la pandemia, y todo ello gracias a la tecnología.
La empresa de retail tech Beabloo ha lanzado Intection Care, una tecnología que permitirá distribuir a los clientes de tal forma que se pueda garantizar su seguridad. La aplicación funciona a través de un sistema integrado por cartelería digital, cámaras térmicas, cámaras y sensores, y el gestor de contenidos de Beabloo.
En la entrada de los supermercados, aparece una pequeña pantalla que indica el número de personas que hay en su interior y registra el número de entradas y salidas. Además, incluso revela la temperatura corporal de cada visitante y prioriza a aquellas personas de riesgo, llegando incluso a generar una alarma para que el personal y los clientes sean conscientes de que ha entrado alguien con más de 60 años.
Además de aportar información sobre la gente que entra y sale del establecimiento, también indica la interacción que estos han tenido en la tienda, para que la limpieza sea más exhaustiva.
La clave para la desescalada
Lo cierto es que todo parece que la tecnología será clave para la fase de la desescalada. «Este producto es potencialmente adecuado para instalar en fábricas y oficinas, con lo que facilitará el regreso y la desescalada con mayor tranquilidad», asegura el CEO de Beabloo, Jaume Portell.
«Esto va de proteger a los clientes y la economía. Queremos aportar nuestro granito de arena ahí y garantizar esos mecanismos de protección. También va de medir con datos objetivos qué pasa en los puntos de venta para poder gestionarlo», añade el empresario. Esta tecnología pronto comenzará a implementarse en entidades bancarias, farmacias y supermercados.
Por el momento, Interaction Care ya ha sido validada e incorpora tecnología de otros partners internacionales como Mirosoft e Intel. La última ya ha certificado el producto como 'Intel Iot Market Ready Solution'.