Han pasado doce meses desde que estalló la pandemia de coronavirus y a pesar de que ha habido muchos avances al respecto y que la incidencia de casos ha disminuido considerablemente, el virus sigue cobrándose víctimas mortales.
Y una de las últimas ha sido Pedro Castro Brancho, un reconocido médico del servicio de Emergencias del 061 de Córdoba, Andalucía.
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Casi dos meses en la UCI
El profesional de la medicina se contagió de coronavirus hace casi dos meses, motivo por el que tuvo que ser ingresado en la unidad de cuidados intensivos del hospital Reina Sofía. Desde entonces el doctor ha permanecido ingresado allí, hasta que este domingo, 15 de marzo, ha fallecido a los 61 años de edad.
Su defunción ha causado gran conmoción en toda la provincia y es que desde que estalló la pandemia el pasado mes de marzo de 2020, han muerto cuatro sanitarios más a causa del coronavirus: los médicos Manuel Barragán y Joaquín Tortosa, la enfermera Fernanda Casado Salinas y la celadora Antonia Juan Jiménez.
Gran conmoción
Para sus compañeros de servicio también ha supuesto un golpe muy duro esta pérdida, tal y como han mostrado en los mensajes que han compartido en sus redes sociales para despedirle. En estas misivas también han señalado que la guardia del domingo en el hospital, tras la defunción de Pedro ha sido «horrorosa».
Antonio Mantero, el director provincial del 061, fue uno de los primeros profesionales que empezó este proyecto. Lleva trabajando en el servicio desde 1990 en este servicio y el fallecimiento de su compañero ha sido un gran mazazo para él.
Este profesional sanitario ha explicado que Pedro Pablo Brancho tuvo que ser ingresado en la unidad de cuidados intensivos del hospital Reina Sofía el pasado 17 de enero. Se contagió de coronavirus pocos días después de empezar el 2021, cuando no estaba de servicio, y desde entonces ha estado hospitalizado, hasta que finalmente la enfermedad ha podido con él.
Antonio Mantero ha recordado a su compañero como «un profesional excelente, que estaba siempre dispuesto a todo y, además, con un corazón enorme».
Rosa Marín, compañera de la quinta promoción de Medicina de Pedro Pablo Brancho, secretaria del Colegio de Médicos de Córdoba y amiga del fallecido, también ha compartido unas palabras para despedirle.
«Era una persona fuerte, sana, deportista, que estaba perfectamente», ha subrayado con profundo dolor al 'Diario Córdoba'. «Era muy agradable, querido y respetado por todo el mundo».
La mujer también ha relatado que Pablo Pedro Brancho siempre había trabajado en Emergencias Sanitarias, tanto desde las ambulancias como de médico referente del centro coordinador y ahora su defunción ha sido un golpe muy duro para todos aquellos que le conocieron.
«Todos los profesionales de la salud estamos expuestos. Nos puede tocar a cualquiera»
La defunción de Pablo Pedro Brancho también ha servido para que Bernabé Galán, presidente del Colegio de Médicos de Córdoba, comparta el peligro que comporta trabajar como sanitarios.
«Cuando fallece un compañero debido a una enfermedad contraída durante su ejercicio profesional, desaparece un héroe. Es algo que la ciudadanía debería conocer mejor».
«Entonces comprendemos, porque nos toca de lleno y muy cerca, que todos los profesionales de la salud estamos expuestos y que nos puede tocar a cualquiera».
«Es también cuando recordamos que no estamos reconocidos por la administración en proporción correspondiente a la intensidad y a la exposición de nuestro trabajo. La solidaridad habitual entre nosotros se crece en estos momentos».
«Tanto el Colegio de Médicos como la Fundación de Protección Social de la Organización Médica Colegial de España se vuelcan en estas circunstancias y los compañeros hacen sentir a los familiares que ellos están presentes para los que necesiten».
La defunción de Pablo Pedro Brancho ha supuesto un golpe muy duro para todos sus compañeros y aunque sus últimos días los pasó en la unidad de cuidados intensivos, siempre le recordarán como la persona fuerte y sana que fue.