23/06/2021 16:30h | Actualizado a 2021-06-23 16:47h
Tal y como hemos vivido, las últimas jornadas han estado marcadas por una cierta inestabilidad principalmente en la mitad norte peninsular. Por si fuera poco, las temperaturas por debajo de las típicas tampoco han ido demasiado acorde con la llegada oficial del verano. Y es que, no parecía acabarse nunca la batalla entre la primavera y el verano de estos días.
Finalmente, parece ser, que el ambiente se decantará hacia el sol y el calor, aunque sea para unas jornadas. De esta forma, el jueves, 24 de junio, será prácticamente tranquilo en toda la península con cielos mayoritariamente despejados.
Sin embargo, aún habrá nubosidad y precipitaciones en áreas del Cantábrico. Pero, el ambiente más inestable del norte tenderá a mejorar con amplios claros a medida que avance el día.
No obstante, por la tarde se podrán escapar algunos chubascos en tramos del noreste de Cataluña y Pirineos. También serán probables en el Sistema Ibérico y áreas de Mallorca.
Con todo ello, las temperaturas darán un importante paso hacia adelante. Las máximas ascenderán de forma evidente en gran parte, salvo en el Estrecho, donde recularán.
Muchos valores al mediodía oscilarán entre los 24 ºC y 34 ºC. Puntualmente se podrán rozar los 35 ºC en el valle del Guadalquivir.
Así pues, nos aproximaremos a tener el calor propio para la época. El ambiente estival y tranquilo irá retomando las riendas, que hasta ahora había perdido, en gran parte del país.
En cuanto a Canarias, el tiempo mejorará y será más estable. Se esperan cielos con intervalos de nubes, pero con apertura de claros por la tarde. Los termómetros sufrirán pocos cambios, aunque las máximas bajarán ligeramente.
Muchas máximas se moverán alrededor de los 24 ºC y 25 ºC. Se dejará sentir el viento del noreste, especialmente en vertientes sureste y noroeste de las islas de mayor relieve.
En cuanto al estado del cielo, este jueves, el sol volverá a ser el protagonista y dominará en general, salvo algunas excepciones. Así pues, aunque predominarán los cielos despejados, habrá nubosidad densa y algunos chubascos en el tercio norte.
En concreto, se esperan precipitaciones durante la mañana en el sector oriental de Cantábrico y norte de Navarra. Estas lluvias tenderán a ir a la baja al mismo tiempo que se abrirán claros por la tarde.
En este sentido, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) aún mantiene algunas alertas por lluvias fuertes en estas zonas. Solo están activadas de madrugada en la Comunidad Foral de Navarra y País Vasco.
Además, durante las primeras horas se formarán intervalos de nubes bajas en áreas montañosas del Sistema Ibérico, Baleares, costa sureste y Mar de Alborán. A medida que avance la jornada, las brumas se irán rompiendo, aunque podrán ser duraderas en el Estrecho.
Por la tarde serán probables algunos chubascos en puntos del noreste de Cataluña y Pirineos. Incluso en el Sistema Ibérico y áreas de Mallorca.
Asimismo, soplará viento en el extremo sur, tanto en la costa de Almería como la gallega. También en el valle del Ebro y Ampurdán.
Si nos fijamos en las temperaturas, subirán de forma considerable y general. El calor empezará a ser el esperado para la época del año, aunque en algunos puntos seguirá bastante frenado. El ascenso será importante en el interior peninsular de hasta 4 a 6 grados de diferencia.
Mientras tanto, bajarán alrededor del Estrecho. La mayoría de máximas se moverán entre los 24 ºC y 34 ºC. Se podrán rozar de forma puntual los 35 ºC en el valle del Guadalquivir.
Y en el Cantábrico, aunque también se notará la subida de los termómetros, muchos quedarán frenados algo por debajo de los 20 ºC.
De cara a los siguientes días, pocos cambios en el tiempo habrá, los cielos soleados seguirán predominando. La calma se apoderará de gran parte del país con el permiso de algunos chubascos puntuales de tarde en el tercio norte peninsular y Pirineos.
Las temperaturas seguirán en ascenso de forma general. Incluso en áreas del sur y suroeste ya se podrán sobrepasar los 35 ºC o 36 ºC.
Por ahora, no se ven a corto plazo lluvias generales ni temperaturas extremadamente altas. Pero el ambiente veraniego y tranquilo, que hasta ahora habíamos perdido, está más que garantizado.
