Plano medio de los hermanos Rocío y David Flores Carrasco andando por la calle

La promesa de Rocío Flores a su hermano: «No pararé hasta meter a mama en la cárcel»

Cada vez hay menos personas que ven a Rocío Flores como una víctima y ya la sitúan como un verdugo más

Rocío Carrasco se siente cómoda delante de las cámaras y ya no tiene miedo a hablar. Sabe que para que se entienda todo lo que ha vivido en su vida es importante poner todas las cartas sobre la mesa, aunque para ella tenga que acabar destapando a su propia hija. De hecho, esto ya pasó en la octava entrega en la que tuvo que explicar la agresión que sufrió por parte de su hija cuando esta aún vivía con ella para que toda España entendiese el motivo tan grande y que las había separado hasta el día de hoy.

Y cuando creíamos que el papel de  Rocío Flores se quedaba allí hoy hemos podido saber que no, que aún había más. Cuando Rocío aún tenía la custodia de su hijo pequeño, David Flores, su padre iba a verlo al colegio y aprovechaba estas visitas para mal meter al niño sobre su madre. Por suerte, el pequeño le contaba todo a su madre y le decía lo que este le pedía cada vez que lo visitaba en su centro escolar.

Según parece, Antonio David Flores le pedía informaciones a su hijo sobre su madre, también le insistía en que le contara todo lo que pasaba en casa y le hiciese cómplice de cualquier cosa que pudiese servirle a él para poder seguir dañando a su exmujer. El uso de un padre sobre un hijo ya es feo, pero aún lo es más si tenemos en cuenta las problemáticas que tiene el niño y que lo hacen mucho más vulnerable ante el aprovechamiento que ejercía su padre sobre él y en contra de su propia madre.

Cuando Rocío supo que el padre del niño iba al colegio para mal meter en su contra, esta habló con el director del colegio y le contó que su padre iba hasta allí para influenciar al niño, pero este le dijo que no podía hacer nada porque ningún juez decía que el padre no podía ir a ver al niño en el centro escolar. Sin lugar a duda, el docente no sabía que no evitando esto estaba ayudando a Antonio David a cometer el peor de los chantajes posibles sobre un menor.

Sin embargo, la peor de las visitas al colegio del pequeño David aún estaba por llegar. Rocío Flores se quedó muda cuando su hijo le contó que su padre había ido de nuevo al colegio, pero en esta ocasión, lo hizo acompañado de alguien y que serviría para acabar de desestabilizar por completo al niño. Antonio David se sirvió también de una joven Rocío Flores para que lo acompañase al colegio de su hermano y que lo convenciese de irse con ellos, diciéndole que lo echaba mucho de menos y que también lo hacía la otra hija que tiene Flores con la actual concursante de 'Supervivientes', Olga Moreno.

Lo más desgarrador ha sido escuchar las promesas que le hicieron Antonio David y Rocío Flores al niño. Mientras su padre le decía que iba a lograr que su madre llorase lágrimas de sangre, la hermana del niño iba más allá y le prometía que no iba a parar hasta que metiese a su madre, Rocío Carrasco en la cárcel. Unas afirmaciones que luego serían utilizadas por Antonio David Flores y que usaría en varias entrevistas para hacérselas suyas y dar la vuelta a la tortilla.

Las falsas promesas de Antonio David a su hijo

Antonio David y como ya hizo con su hija cuando esta era pequeña, logró ganarse a su hija a base de falsas promesas. Incluso le pedía a su hijo que dejase los estudios porque eso no le serviría de nada. Para convencerlo le prometió que él lo llevaría al programa 'La Voz' para que triunfase e incluso, le dijo que lo ayudaría a sacar su primer disco. Unas promesas que solamente servían para seguir separando al niño de su madre.