Olga Moreno en Supervivientes 2021

Olga Moreno tiene miedo de volver a casa

La mujer de Antonio David no sabe resolver todos los escándalos que ha creado

Olga Moreno viajó a Honduras siendo la mujer de Antonio David Flores. Pero, nada más poner un pie en la isla, se ha convertido en un personaje con entidad propia. El problema es que ha tenido que pagar un precio demasiado caro. Nada más empezar el concurso, Jorge Javier Vázquez le avisó: «aquí, únicamente eres concursante de 'Supervivientes'».  

Sin embargo, hablar de Rocío Carrasco es un negocio demasiado atractivo. Así que, la empresaria no sé ha podido resistir a participar del mismo. No consiente que, el padre de su hija, haya sido desterrado de la televisión. Está intentando lavar su imagen, para que el público le convierta en víctima de la historia. Aunque, por desgracia para ella, la audiencia ya ha dictado sentencia.  

Hay mucha gente que no confía en la versión de Rociíto. Pero, todos coinciden en algo: su exmarido se ha aprovechado de ella. Ha ganado cinco millones de euros vendiendo sus secretos al mejor postor. Son datos objetivos que el juez está teniendo en cuenta para el nuevo proceso judicial en el que se ha visto involucrado. Según los expertos, podría ingresar en la cárcel durante una buena temporada.  

«Del 2010 al 2011, la sociedad de su mujer cobra más de 130.000 euros. Todo por intervenciones televisivas o entrevistas en prensa. La mayoría de esas cantidades no las cobraba él, sino sociedades a las que no pertenecía. Dice que había estado dos años sin trabajar por mi culpa. Eso es mentira. Se declara insolvente y solicita justicia gratuita», explica Rocío en 'Contar la verdad para seguir viva'.  

Olga Moreno ha sacado un gran rendimiento de esta estrategia mediática. Y, ahora que el señor Flores no puede continuar con el negocio, ha sido ella misma quien ha tomado las riendas de la situación. 'Supervivientes 2021' se ha convertido en el escenario perfecto para atacar a su peor enemiga. Aunque, según va avanzando la aventura, el miedo se ha apoderado de su ser.  

En un primer momento, la sevillana no tenía ningún pudor en vender la intimidad de Carrasco. De hecho, contaba con el apoyo de una parte importante del público. Pero, mucha gente considera que ha traspasado ciertos límites, como por ejemplo nombrar a su madre, Rocío Jurado. Así que, todo hace pensar que, en cuanto entre por las puertas de Telecinco, su trayectoria se va a convertir en un infierno. 

Recientemente, ha reconocido que se había equivocado: «Se me ha ido la boquita. Me van a matar por hablar». Cada vez falta menos para que dé la cara, y parece que no tiene fuerza suficiente para solventar todos los escándalos que ha generado.  

La hija de Antonio David frenó a Olga 

La madrastra de Rocío Flores se ha equivocado. Tenía la posibilidad de dejar atrás sus problemas familiares, pero decidió que formaran parte de su concurso. El lado bueno, es que, gracias a ellos, está siendo una de las protagonistas de la edición. Aunque, cuando regrese a España, tendrá que enfrentarse a una situación bastante delicada, y no tiene experiencia suficiente para salir airosa.  

La dirección de 'Supervivientes' ha emitido unas imágenes de Olga defendiéndose del huracán Carrasco. En este intento, ha arremetido duramente contra ella, y ha hecho confesiones que deberían haber permanecido ocultas. Es consciente de que ha cometido un error, pero ya no puede dar marcha atrás.  

Algunas de sus declaraciones han terminado perjudicando a la única persona que se atreve a defenderla: la nieta de la Jurado. De hecho, en una de sus intervenciones, reconoció que el comportamiento de la empresaria le estaba perjudicando.  

Marta López, íntima amiga de Moreno dentro del reality, ha admitido que, una de las actividades preferidas de la concursante, es comentar los capítulos de 'Contar la verdad para seguir viva'. No ha desvelado cuál es su verdadera opinión. Pero, teniendo en cuenta el comportamiento que ha tenido delante de cámaras, no sería de extrañar que, cuando nadie le esté escuchando, haga unas acusaciones terribles.