Olivia y Anna, hermanas de 6 y 1 años desaparecidas en Tenerife

Tomás y Beatriz ya perdieron a un hermano de las niñas desaparecidas

La madre de las pequeñas confiesa otro amargo momento por el que tuvieron que pasar

Cuando se cumplen 34 días desde la desaparición de Anna y Olivia, una nueva carta de Beatriz, la madre de las niñas, sale a la luz para conseguir conmover el corazón de Tomás, su padre, que decidió no devolvérselas y desaparecer con ellas del mapa. Un mes sin tener noticias del paradero de las menores de 6 y 1 año que mantienen en alerta a un amplio dispositivo de búsqueda que les lleve a descubrir alguna pista sobre dónde se pueden encontrar.

Mientras el robot y el sonar del buque Ángeles Alvariño ha comenzado a buscar en el fondo del mar cualquier indicio que les lleve a las pequeñas, Beatriz Zimmermann, publica una desgarradora carta dirigida a sus hijas con la esperanza de poder abrazarlas pronto. En ella recuerda a las pequeñas y alaba el fuerte amor que se profesan, además de confesar otra pérdida que todavía pesa en su corazón.

Anna y Olivia perdieron a un hermano

Han sido varias las cartas que Beatriz ha ido enviando a la prensa para que se hagan públicas en un intento de que Tomás las escuche y decida poner punto y final a la desaparición de las pequeñas. Son ya varios días sin saber nada ni del padre ni de las niñas y el miedo a que les haya pasado algo va en aumento. En esa última misiva la joven reconoce no poder más, pero se niega a perder la esperanza.

«Me levanto y cojo fuerzas y rezo a Dios, al Universo, que vuelvan a mí de manera como un mantra, una y otra vez. Sé que sienten mi amor y sé que volveremos a estar juntas» dice en la carta confiando en que nadie se olvide de las pequeñas y agradeciendo el apoyo y esfuerzo que se está realizando para encontrarlas.

Un nuevo llamamiento desesperado donde la progenitora califica a Olivia como una niña «muy fuerte y sensible a la vez» y recuerda sus logros: «Olivia, mi cinturón amarillo en kárate con tan solo 5 añitos. Tu profe Antonio siempre me decía que te veía en las olimpiadas. Mi jineta, hace dos meses montaste por primera vez a tu pony. Recuerdo esa cara de felicidad».

Además, confiesa el duro momento por el que tuvieron que pasar cuando perdieron a un hermanito con ocho meses de embarazo: «Esperamos a Anna y Olivia con unas ganas inmensas después del palo de haber perdido a tu hermanito con 8 meses de embarazo» cuenta Beatriz que añade: «Una experiencia muy dura que sobrellevaste de una manera increíble».

Confía en el carácter protector de Olivia

Anna y Olivia siempre han estado juntas, y juntas han desaparecido a manos de su padre. Una ausencia que pesa cada día más sobre la familia y más sobre Beatriz quien intenta mantener la esperanza de verlas pronto. No tener ninguna noticia ni pista llena de amargura los días y semanas y solo el recuerdo de ellas logra mantenerla en pie.

En la carta que ya circula por todos los medios de comunicación, la madre se agarra al carácter protector de Olivia en la que confía esté cuidando de su hermanita pequeña como siempre ha hecho: «Siempre tan valiente, tan llena de entusiasmo y vida» recuerda relatando las ganas que tenía de tener una hermanita.

«Olivia, tenías tantas ganas de tener a tu hermanita. Nunca mostraste celos y siempre me decías que tú eras su protectora. Ahora lo pienso y me sorprende... su protectora... los niños tienen un sexto sentido y quizá por algo lo decías» reflexiona.

«Las quiero con todo mi corazón y alma» termina la carta pidiéndole a Olivia que le recuerde a su hermana pequeña pues «ella no sabe leer», lo mucho que su mamá las quiere y las ganas que tiene de volver a abrazarlas.