Caroline del Valle en una imagen de archivo

Sin rastro de Caroline, la joven de 14 que desapareció misteriosamente en un botellón

Seis años después se ha archivado el caso por falta de pruebas suficientes para inculpar a nadie

Con tan solo 14 años, la pequeña Caroline del Valle, desapareció sin dejar rastro alguno en la ciudad de Sabadell en 2015. Una notilla que pilló a todos por sorpresa y que mantiene a toda una familia en vilo tras las extrañas circunstancias que la acontecieron.

A día de hoy, seis años después de esta misteriosa desaparición, existen muchas dudas, muchos enigmas por descubrir, y algunas preguntas por responder cómo, dónde está Caroline.

Todo ocurrió el 14 de marzo del 2015 cuando la niña de 14 años, Caroline del Valle, le pidió a su madre si podía salir un rato con sus amigas y quedarse a dormir en casa su amiga Silvia. Nada raro como para que la madre le dijera que no. Pero la realidad fue bien distinta a la del resto de veces, Caroline nunca volvió a casa y por el momento no existe ninguna hipótesis sólida sobre dónde podría estar o si sigue con vida.

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Silvia, la amiga, reconoce que mintió a la madre de Caroline

Por su parte, momentos previos a la desaparición de su hija, la madre, Isabel Movilla, trató de hablar con el padre de Silvia, que le dijo que se quedaría a dormir en su casa. Al día siguiente por la tarde, cuando la madre de la niña vio que su hija no volvía a casa, hacia las 19:00 de la tarde, llamó a la amiga, para preguntarle cuándo vendría su hija y, en ese mismo momento, Silvia le respondió que acababa de salir por la puerta y que llegaría en poco tiempo.

No obstante, las horas iban pasando y Caroline no aparecía y, hacia las 23:00, Movilla volvió a llamar a Silvia para preguntarle dónde estaba su hija y ella le dijo que no lo sabía y, en este momento, empezó a buscarla desesperadamente, pero no la encontró. Durante la investigación, Silvia reconoció que mintió a Movilla.

Momentos de tensión para la madre que veía que pasaban las horas y su pequeña no aparecía. Es entonces cuando se puso en contacto con las amigas de Caroline para pedir colaboración y una de ellas publicó una instantánea de la niña en las redes sociales para facilitar su búsqueda. Media hora después, esta amiga le envió un mensaje a la madre explicándola que le habían dicho que Caroline se situaba muy lejos de Barcelona, que estaba muy mal y que no quería que la buscara bajo ningún concepto.

Sin dudarlo ni un instante, la madre acudió a comisaría y denunció su desaparición. El último momento en el que fue viste Caroline, fue en la Zona Hermética de Sabadell, cuando se fue de fiesta con su grupo de amigos, entre los cuales, había alguno de ellos que eran niños problemáticos y que en alguna vez se habían fugado de un centro de menores.

Una patrulla de los Mossos d'Esquadra cuando se encontraban en esta ubicación los intentó identificar, eran alrededor de veinte personas, todas ellas menores de edad. Comenzaron a correr para evitar ser identificados por la policía y pasadas las horas, volvieron a quedar en el punto de encuentro anteriormente acordado, en el McDonald's de la estación de Sants, pero Caroline nunca llegó.

El principal sospechoso y foco de atención

Actualmente no existen hipótesis claras, pero sí bien es cierto que el principal sospechoso de la desaparición es Justin, la última persona que vio a Caroline. Los agentes sospecharon en primera instancia de él porque cuando llegó al punto de encuentro llevaba puesta la ropa del revés, tenía restos de barro y decía que se había escondido en un castillo abandonado de Can Feu, en las medianías de Sabadell, en donde, según el chico, permaneció durante dos horas sin utilizar el móvil para nada.

Lamentablemente tal y como apunta la madre, los amigos de Caroline no se muestran colaborativos durante la investigación, que se ha archivado por falta de pruebas suficientes para inculpar a nadie.