Tomás Gimeno y sus hijas Anna y Olivia

Los amigos de Tomás arrojan algo de luz a qué podría haber pasado con las niñas

Hace ya 20 días que no se tienen noticias sobre ellos y aumenta la preocupación de que haya hecho daño a Ana y Olivia

Tomás Gimeno sigue en paradero desconocido junto a sus dos hijas, Ana y Olivia, de 1 y 6 años de edad. Tras prácticamente tres semanas de búsqueda, de momento no hay rastro de él ni de las niñas, lo que ha puesto en alerta a las autoridades de todo el país y, especialmente, a la madre de las pequeñas. 

El temor a que Tomás pueda haberle hecho algo a las niñas aumenta con el paso de los días, sobre todo porque en España, lamentablemente, tenemos muchos casos recientes donde este tipo de actos han acabado con un final muy trágico para los hijos.

A pesar de todo, la Guardia Civil no descarta ningún tipo de hipótesis y, salvo indicios que indiquen lo contrario, la tendencia es pensar que las niñas están bien y que simplemente están con su padre, escondiéndose y quizás preparando una forma de solucionar todo este asunto. 

Los amigos más cercanos de Tomás, entrevistados por las autoridades y medios de comunicación de todo el país, siguen sin entender qué pudo pasar por su cabeza para largarse con las niñas en un intento de hacer daño a su madre, que estaba en una nueva relación con un hombre mayor que ella y a quien Tomás no aceptaba. 

Preguntadas por Telecinco, amigas de Tomás insistieron en que no creen que el padre haya hecho daño a las niñas, que eso no encajaría con la persona que ellas conocen, y le volvieron a mandar un mensaje para que recapacite y entregue a las niñas a su madre para evitar daños mayores. 

Desde la cadena de Mediaset entrevistaron a una chica que, supuestamente, había sido pareja de Tomás en el pasado. Ella confirmó que a Tomás no le gustaba el nuevo novio de su madre, y especialmente, que las niñas estuviesen con él. Cuando Tomás sabía que ese hombre estaba en la isla junto a la madre de las pequeñas, él iba a buscar a la niña para que no pudiera pasar tiempo con él, quizás porque tenía miedo de que otra figura masculina ocupara una posición paternal respecto con las niñas. 

La entrevista explicó que, a pesar de ese rechazo hacia el nuevo novio de la madre, Beatriz, Tomás jamás haría daño a las niñas, porque lo que él tiene con ellas es auténtica «devoción» y siempre hablaba de ellas. «No lo veo capaz», insiste. 

Otra amiga de Tomás que le conoce prácticamente desde que eran niños se mostró igual de segura de que él no ha hecho nada con las niñas. Telecinco señaló que el padre de las niñas habría enviado un audio de WhatsApp a un grupo de amigos explicando lo que había sucedido, y que cuando lo oyeron el resto de sus amigos a la mañana siguiente, salieron a buscarle navegando por la zona, sin entender ni creer que hubiera podido hacer algo así. 

«Era en plan: te quiero, hermano», explica esta amiga, que cree que el mensaje era más una despedida que otra cosa. Ella insiste en que «lo que sí tenemos claro es que no les ha hecho daño a las niñas», que Tomás es un chico «bueno» y de una familia «bien», rechazando la versión que se está conociendo sobre él como un posible maltratador.

Casi tres semanas sin rastro de Tomás, Ana y Olivia

Mientras tanto, las autoridades siguen la búsqueda de Tomás y de las niñas por tierra, mar y aire. Además, brigadas y asociaciones de voluntarios están peinando todo Tenerife, especialmente la zona del sureste, intentando encontrar a Ana y Olivia. 

Durante estas semanas han aparecido varias posibles teorías de dónde podrían estar, como una de una mujer que aseguraba haber visto a los tres en una playa de Cádiz, algo que a los pocos días quedó descartado.

Este mismo lunes, por ejemplo, las autoridades han vuelto a registrar la casa de Tomás en Tenerife con perros especializados traídos expresamente desde Madrid, buscando posibles restos biológicos en la vivienda que indicasen que él y las niñas pudieran haber estado ahí recientemente o buscando alguna pista que les indique dónde podrían estar.