El origen de un delicioso bollo se remonta a la Holanda del siglo XVII donde, tras cruzar el Atlántico con los emigrantes que llegaron a Pennsylvania y después de que Hanson Gregory agujereara la masa de su madre para se hiciera mejor, este dulce recibió el nombre con el que nos referimos hoy en día a uno de los postres más famosos de nuestra historia: Si, así es los donuts.
Si quieres saber cómo elaborar un donut casero de la misma forma que los hacía la madre de Gregory, calma. Una nutricionista llamada Blanca ha puesto al alcance de todos los seguidores de Instagram su receta estrella de lo más sana, ya que no posee ni azúcar, ni gluten, ni edulcorantes ni tampoco lácteos.
En primer lugar, pela la manzana (o zanahoria) y córtala a trocitos, ponla en un plato y métela al microondas 2 minutos sin tapar. En el caso de utilizar la zanahoria métela hasta que quede blanda.
A continuación, mezcla todos los ingredientes juntos (el plátano aplastado con el tenedor, la manzana asada, la levadura, los copos de avena, los huevos y la canela) en una batidora de mano y listo.
Seguidamente añade la mezcla en el molde y métela en el horno a 200 grados unos 10-20 minutos (previamente calentado) siempre vigilando.
Mientras en un bol deposita las onzas de chocolate y el aceite de coco y caliéntalo 1 minuto y medio en el microondas hasta que consigas que quede líquido.
Y finalmente baña los donuts en el chocolate por encima y espolvorea por encima avellanas machacadas o cualquier fruto seco. (Se recomienda que pongas debajo un papel de horno para que al enfriar no queden pegados al plato donde los pongas) Los donuts pueden conservarse en buen estado 1 o 2 días en la nevera o incluso en el congelador.