Rocío Carrasco concedió este miércoles la entrevista final de su documental, y estuvo muy bien acompañada por su inseparable marido, Fidel Albiac.
El sevillano no ha abandonado a su mujer en ningún momento, y escuchándola hablar no pudo evitar emocionarse y romper a llorar tras bastidores.
Unas imágenes que ha compartido en exclusiva el programa 'Socialité' y donde se ve a Albiac apoyando a Carrasco desde las sombras. Así, durante la emisión no dejaba de moverse de un lado a otro, muy interesado por la forma en la que se grababa el programa.
Una faceta completamente desconocida que no habíamos llegado a ver de él. Y es que la noche del miércoles nos quedamos sin palabras. Sobre todo, después de que se anunciara en exclusiva que habrá segunda parte del documental.
Titulado 'En el nombre de Rocío', viene con fuerza, ya que la protagonista del momento piensa aclarar los motivos por los que se ha distanciado de gran parte de su familia.
Fidel Albiac, muy pendiente de su mujer y de la forma en la que se grababa la entrevista
Tal y como ha mostrado el programa de María Patiño, se vio a Albiac muy pendiente en todo momento de lo que ocurría en plató detrás de cámaras y en realización.
Aunque, también acudió a saludar a los miembros del equipo de forma bastante cariñosa, e incluso atendió al grupo de fans de Rocío Carrasco congregados ante las puertas de Mediaset.
Durante los descansos, el marido de Rociíto no dudo en acompañarla a tomar aire, pero no pudo soportar ciertos temas como el de Rocío Flores. Ahí le superó la emoción y tuvo que salir del estudio incapaz de escuchar el relato.
Un tema nada fácil de tratar, sobre todo por el sufrimiento que ha supuesto para su mujer. Carrasco perdía a su hija en 2012, después de que le propinase una brutal paliza y se atreviese a denunciarla poco después por maltrato.
A partir de ese día, se iba a vivir con su padre, Antonio David Flores, y no han vuelto a hablar. La hija de 'la más grande' achaca esa ruptura del vínculo materno-filial con la manipulación que 'el ser' ha ejercido sobre la joven.
«Mi hija me transmite, que para mi desgracia, sigue siendo la misma persona que era el 27 de julio de 2012». La misma persona que la dejó tirada en suelo tras darle una paliza. Carrasco está convencida de sus lágrimas no son de verdad.
Una Rocío tranquila, segura y sin miedo
Durante la grabación, incluso hubo tiempo para que Fidel respondiera alguna pregunta acerca de como afrontan a partir de ahora su nueva vida.
Cuando le preguntan al sevillano, él alega que ve a su mujer «segura, tranquila y sin miedo». Sus primeras palabras en estas últimas semanas.
Además, asegura que ha permanecido «expectante y viendo con sorpresa lo que iba sucediendo. La he visto bien, bastante cómoda». E incluso se atreve a inmortalizar varios instantes del directo.
Además, no estuvo solo, sino que llegaba acompañado de la inseparable amiga de la pareja, Anabel Dueñas.
Carrasco está segura de que si en 2019 hubiese conseguido su objetivo de quitarse la vida, la historia se habría contado de otra manera. Además, tiene claro que se habría culpado a su marido. Sin embargo, y por suerte, el trágico episodio tuvo un final diferente.
La pareja está en su máximo apogeo, y según apuntan diversos colaboradores, pudiese ser que Rociíto contase con varios documentos manuscritos de su madre. Documentos en los que La Jurado hablaría sobre cada uno de los familiares y que todavía no han salido a la luz.
Y mientras Rociíto se prepara para dar su golpe maestro, su familia intenta asimilar lo que está por venir.
Ortega Cano delicado de salud, Rocío Flores con semblante serio y frialdad, y Amador Mohedano amenazando con demandar.