Hace poco Rocío Flores dejaba a todos de piedra tras hacer un llamamiento público a su madre y admitir que la había llegado a llamar en dos ocasiones para intentar aclarar la situación, aunque sin éxito.
La joven se armaba de valor, y se atrevía a pronunciarse en directo desde 'El Programa de Ana Rosa'.
«No voy a entrar a debatir el documental, pero siento la necesidad de explicar cómo me siento. "Me estoy creando una coraza y no soy así. Si me quedo en mi casa es porque tengo algo que ocultar; y si vengo y soy agradecida, no tengo sentimientos», explicaba hace una semana acerca de esa frialdad que muchos aseguran que muestra ante la situación.
«Y eso no es así. Tengo sentimientos, y no pocos. Se juzga y se prejuzga. Las cosas no son así. Y cuando digo que no son así, es porque conozco la realidad», sentenciaba Rocío Flores dando a entender que ella también tenía su versión de los hechos.
«Conozco a mi madre mejor que nadie y sé lo que he vivido con mi madre», alegaba, para dar paso a un llamamiento público a Rocío Carrasco que dejaba a todos impactados.
«Mamá, lo he intentado por activa y por pasiva, de forma privada muchas veces. Ayer volví a llamar a mi madre, dos veces. Y veo que la única manera que tengo que contactar es así, en público», afirmaba bastante emocionada.
«A tus hijos no te los ha arrancado nadie. Coge el teléfono y habla con tus hijos, en privado. Habla con nosotros. Siéntate con nosotros. Lo digo de corazón y como lo siento. No puedo más, la situación en mi casa es insostenible», aseguraba dando a entender que esa iba a ser la única vez que se iba a pronunciar sobre el tema.
Sin embargo, la respuesta de su madre no fue la esperada, aunque tampoco se hizo de esperar. Rocío Carrasco explicaba en directo durante su extrevista que tenía motivos de peso para no cogerle el teléfono a su hija.
Para empezar, que los especialistas que la estaban tratando le habían recomendado no hacerlo por el bien de su tratamiento, ya que «hacerlo sería como volver a la casilla de salida». Y, después, porque no se sentía preparada para dar ese paso. «No es el momento, y creo que ella tampoco está preparada», manifestaba dejando clara su decisión.
Queda claro que Rociíto considera que este no es el momento indicado para retomar la relación con su hija, aunque todavía no pierde la esperanza de poder recuperla algún día. Pero, ¿qué pasa con las otras llamadas que supuestamente se produjeron antes de que estallara el documental?
Aunque Carrasco ha negado que su hija se pusiera en contacto con ella tras su intento autolítico en 2019, hay informaciones que sí que aseguran que la joven habría intentado ponerse en contacto con su madre tras conocer esa noticia tan terrible.
Sin embargo, esa supuesta llamada del 3 de diciembre a la que Rocío se refiere, no data del 2019, sino del 2020, un año y cuatro meses de ese espisodio que casi le cuesta la vida a Carrasco. Así, la hija de Antonio David jamás habría intentado ponerse en contacto con ella para saber cómo se encontraba después de haber sido ingresada en urgencias por una sobreingesta de medicamentos.
De hecho, cabe recalcar que Antonio David tenía perfecto conocimiento de este hecho, ya que le comunicó mediante la solicitud de ampliación de la denuncia que tenía interpuesta en el juzgado.
Sin embargo, el día en el que Rocío Flores sí que llamó a su madre en diciembre de 2020, pudo estar relacionado con un tema de Olga Moreno, quien en ese momento acababa de recibir una querella interpuesta por Carrasco por desvelar el contenido privado que contenía una carta. ¿Un intento de interceder por la mujer de su padre y defenderla ante ese ataque?