José Ortega Cano siempre ha defendido que estaba enamoradísimo de Rocío Jurado, y que incluso a día de hoy la sigue queriendo. Sin embargo, parece que hay otra realidad que solo el círculo más cercano a la pareja conoce, y que ha puesto de manifiesto en exclusiva el ex chófer de la pareja, José Escudero en el programa 'Socialité'.
Ya Rocío Carrasco advertía en su documental que su madre se había equivocado al casarse con el torero. Además, según ha contado Escudero, la realidad del matrimonio no era tan idílica como podía parecer de cara al público.
«Yo empecé a colaborar con Ortega Cano entre 1988 y el 1989. Rocío le tenía apreció a José, pero amor ya no sé. José en realidad estaba enamorado de lo que representaba Rocío, no de Rocío como mujer. Cuando la conoció su toreo bajó, estaba más distraído, la relación con Rocío le condicionaba mucho».
«La relación de ellos era difícil, no se llevaban. Discutían mucho, y eran discusiones muy fuertes. Se enfadaban por turnos, un día se enfadaba él, y otro día se enfadaba ella. Si me preguntas si Ortega Cano le fue fiel a Rocío Jurado, solo puedo decirte que jamás ninguna mujer ocupó el sitio de Rocío».
Además, ha ido más allá y ha asegurado que «Rocío tenía un problema de salud y él no podía tener hijos, y llegaron a la conclusión de que tenían que adoptar. Ahí también había conflicto, porque Rocío tenía mucho enfrentamiento con el hijo. Había mucha diferencia del niño respecto a la hermana, venían de superar ciertas situaciones complicadas, y él causó problemas desde el principio. José quería ser padre y esa fue la solución que encontraron».
Por otro lado, atestiguaba que presenció alguno de los hechos que ha relatado Rocío Carrasco en su documental, aunque no tenían nada que ver con como lo vivió el chófer.
«Rocío estaba muy consentida. Cuando le comunicó a la madre que se iba a vivir Argentona, es verdad que Rocío Jurado se tiró al suelo con cierto dramatismo. Tuvo un ataque de histeria bastante importante, pero su hija estaba a unos pasos de ella mirándola desde arriba con frialdad. Estaba fría con su madre», ha contado.
«Rocío Jurado era una gran cantante, para mí la mejor, pero se exageraba. Lo de tirarse al suelo estaba un poco como trabajado. Ese tipo de actuación lo coge su hija y también José. Él no se metía en nada del enfrentamiento entre madre e hija, cuando Rocío y su hija discutían, que discutían acalarodamente, esa impotencia que Jurado sentía se la trasladaba a Ortega Cano».
En concreto, el chófer ha destacado que Carrasco tenía que llevarle la contraria a todo el mundo, era muy rebelde. «Si no se hubiesen opuesto a la boda con Antonio David, ella no se hubiese casado», ha asegurado dejando entrever un poco más acerca del carácter de Rociíto.
«Tenían una rivalidad importante con su madre. Bastaba que su madre le dijera que 'no', para que ella dijera que 'sí'. Tenía a Antonio David por un chulo de playa, eso era lo más suave que le decían. Rocío siempre le trataba mal, y el resto de la familia también estaba en su contra. Pero, parece que finalmente hicieron piña con él, pero había que aguantarlo, claro. Era todo un paripé».
«Rocío Jurado creo que se quedó a gusto cuando se separaron». Y, José Escudero apunta a que la primera infidelidad de Antonio David no fue con la camarera Sonsoles, sino más bien con la niñera que cuidaba de sus hijos.
«José me contaba que el primer contacto físico que tuvo David era con la chica que cuidaba a los niños. Toda la culpa era de David, que era quien había empezado con los engaños».