Seguramente en estos momentos Antonio David Flores se encuentra en su casa deseando que se emita ya el último episodio de la docu serie 'Rocío. Contar la verdad para seguir viva', pues cada una de las entregas que se va emitiendo deja peor al ex colaborador de 'Sálvame' y lo dibuja como un auténtico estratega y que se ha encargado durante muchos años a cagarse la imagen pública y el estado ánimo de su exmujer, Rocío Carrasco. El episodio de la semana pasada fue especialmente dura, pues Carrasco narró como su hija Rocío Flores la había agredido en la cocina de la casa hasta dejarla inconsciente en el suelo.
Hoy hemos sabido que esto siguió con la hija y su madre acudiendo a la Guardia Civil para interponer una denuncia en contra de Rocío Carrasco por haber agredido a su hija, una historia que habría acudido justamente al revés. Por si todo esto fuera poco, hoy hemos conocido otra nueva agresión de la madre a la hija y que por lo visto, fue negada por Rocío Carrasco ante el juez para no perjudicar aún más a su hija.
En el atestado se recogía la agresión de la cocina, entre otros insultos y amenazas. Al final de este escrito se decía que en un primer momento se habló de una agresión con un cuchillo por parte de la hija a la madre, pero esto fue negado por Carrasco creyendo que así estaría protegiendo a la menor. Hoy hemos sabido que ese episodio ocurrió y que Rocío Flores agredió a su madre con el cuchillo con el que se estaba comiendo una manzana. Supuestamente le rajó una mano a Carrasco, dejándole una cicatriz y que aun a día de hoy conserva en sus carnes.
La protagonista de la docu serie ha contado que cuando esto ocurrió, su hijo pequeño se puso de por medio mientras que ella hacía entender a su hija que lo que había hecho estaba mal, pero de nuevo, esta no entendía que todo lo que estaba haciendo no estaba bien, pero seguramente por las influencias de su padre seguía actuando como si nada, sin saber que le esperaba una sentencia muy dura y que le iba a imponer la justicia.
Condenada por cuatro delitos distintos
La juez del menor dictó cuatro delitos distintos sobre la persona de Rocío Flores. El primero fue un delito por maltrato continuado durante tres años, otro delito por maltrato puntual por la pelea ocasionada ese 27 de julio, una falta de injurias y otra falta por amenazas. Esto ocasionó que la justicia dictaminase 60 horas de trabajos por el bien de la comunidad y que se podían sustituir por seis meses de libertad vigilada, con asistencia a un seguido de entrevistas con profesionales para comprobar que se estaba recuperando de sus malas acciones.
Finalmente la joven decidió no hacer las sesenta horas de trabajos para la comunidad y se dictó que tendría que cumplir los seis meses de libertad vigilada. Sobre las agresiones del 27 de julio, el auto recoge un seguido de lesiones que realizó la hija sobre su madre y que a continuación relatamos. Existieron poli contusiones, edemas en las muñecas y en el muslo, en el antepié y hematomas en los dedos de los pies.
Además de las agresiones físicas, también se recogen algunas injurias verbales de la hija hacía la madre como por ejemplo; eres una guarra, tú no eres mi madre o tengo ganas de partirte la cara, que se podría entender como una amenaza. Por todo esto, la justicia dictaminó que durante muchos años Rocío Flores atentó contra la paz familiar del hogar y que por ello, tendría que cumplir la pena anteriormente citada. Ahora nos faltará ver como reacciona Rocío Flores ante todo lo que ha contado su madre, seguramente no tardará en hacerlo en 'El programa de AR' dónde acostumbra a acudir para comentar 'Supervivientes', un pretexto que utiliza para poder hablar del tema familiar.