Samantha Hudson se ha convertido en la concursante más irreverente y simpática de MasterChef Celebrity, y es que nos ha regalado alguno de los momentos más divertidos del talent show culinario.
En tan solo dos programas, la artista ha conseguido ganarse a la audiencia con su encanto y personalidad desinhibida.
Lamentablemente, eso no la ha servido para librarse la expulsión. Hudson no tuvo la mejor semana, y ella misma se consideraba la peor en todas las pruebas.
La mezcla entre tradición y vanguardia pudo con ella, que terminaba realizando un plató "infumable" según los jueces.
De hecho, Jordi Cruz llegaba a reprocharle su actitud derrotista. "Esto es un reflejo de la actitud que tienes contigo misma y que nos quieres mostrar. Esto es una mamarrachada", la reprendía el chef.
"La limpieza y el orden han sido unos grandes ausentes. Te hemos visto trabajar derrotada", añadía.
Por su parte, Samantha reconocía que la situación había podido con ella. "Masterchef es más duro de lo que pensaba", terminaba admitiendo. "Yo no quiero tener talento, quiero ser una mediocre", matizaba.
El escándalo que casi termina con la carrera de Samantha Hudson
Conocida como Samantha Hudson, pocos sabrán que el verdadero nombre que se esconde tras la artista es Iván González.
Ella misma siempre ha reconocido haber sufrido una metamorfosis. "Iván era una oruguita monísima y Samantha Hudson es la mariposa que ha emergido de ese capullo".
Defensora de la identidad de género, asegura que no le molesta que le pregunten si es chica o chico. "Creo que es un síntoma de que vamos por buen camino porque antes ni se interesaban", aseguraba en una entrevista.
"Nadie me explicó que el género es simplemente un constructo social, que puedes extenderte entre esas dos realidades y considerarte no binario", manifestaba.
Samantha empezaba a ganar popularidad cuando apenas tenía 16 años. Todo gracias a la publicación de un videoclip titulado 'Maricón' que publicaba en las redes sociales para un proyecto de la asignatura de Cultura Audiovisual de su instituto.
De forma inesperada, la canción que defendía el derecho a ser gay, terminaba volviéndose viral. Y rápidamente terminaba llegando a más de medio millón de visualizaciones en YouTube y catapultándola a la fama.
"Lo único que puedo ser es un altavoz de un discurso del que no soy pionera, pero que atañe a problemas y cuestiones sociales muy característicos de mi generación", explica.
Sin embargo, y en pleno auge de su carrera artística, un escándalo hizo tambalear los cimientos de lo que había construido.
Sobre todo, después de que se filtrasen unos desagradables mensajes que había escrito en Twitter años atrás.
Y es que llegaba a hacer afirmaciones tan terribles como: "Odio a las mujeres que son víctimas de violación y que recurren a centros de autoayuda para superar su trauma. ¡Qué putas pesadas!" o "Lloro de risa con vídeos de acoso escolar que acaban en suicidio".
"Quiero hacer cosas gamberras como meterme a una niña de 12 años por el ojete" o "P*** z**** que vas embutida y te dejan entrar por g*****".
Declaraciones que generaban un gran revuelo e impactaban a sus seguidores, que no daban crédito.
"Las mujeres tenemos que compartir baños, vestuarios y demás espacios seguros con tipos como Samantha Hudson", denunciaba una usuaria. "Vaya asqueroso degenerado", comentaba otra.
Y tras el revuelo generado, a Samantha no le quedaba de otra que disculparse públicamente. El escándalo le suponía cancelaciones de varios proyectos, lo que muchos usuarios aplaudían en redes.
"En fin, me sabe fatal haber escrito eso en algún momento de mi vida solo por intentar llamar la atención y hacerme la divertida", se excusaba.
Un tema sobre el que MasterChef Celebrity todavía no se ha pronunciado, haciendo oídos sordos a la polémica.