Meghan Markle y el príncipe Harry siguen lidiando con la tremenda avalancha que ha desatado su entrevista con Oprah Wenfrey, aunque más que compresión y apoyo, parecen estar obteniendo todo lo contrario.
Y es que no dejan de lloverles las críticas a diestro y siniestro. De hecho, aseguran que el pueblo británico ya siente 'un profundo rechazo' hacia ellos, por lo que han pasado ser la pareja más querida del momento, a la más odiada en cuestión de meses. Bien dicen que del amor al odio solo hay un paso.
Y, como era de esperar, la familia de Meghan no ha tardado en subirse al carro, empezando por su padre, Thomas, quien en un primer momento sacaba la cara por la monarquía británica y ponía en entredicho las acusaciones de su hija acerca del 'racismo' del que habían sido víctimas ella y su hijo Archie.
Thomas Markle intenta recuperar a su hija
Además, arremetía con dureza contra Harry, asegurando que él no era nadie para dar lecciones morales después de todos los escándalos que había protagonizado durante su juventud. Pero, ahí no queda la cosa, ya que Thomas Markle parece haber cambiado de estrategia y ahora se atreve incluso a acusar al marido de su hija de no haber sabido cuidarla.
«Yo estaba preocupado por ella, y preocupado porque nadie estaba cuidándola. Harry y su hermano eran responsables de cuidarla porque ambos ven a psicólogos», sentenciaba con dureza metiendo dentro del saco también al príncipe Guillermo. «Ella nunca había tenido un problema así en su vida».
Y no ha dudado en dejarle las puertas abiertas a su hija. «Estoy aquí y ella puede comunicarse conmigo cuando quiera. Son unas tres horas en coche para venir a verme o ir a verla». Ahora la pregunta es, ¿accederá la duquesa de Sussex a esta invitación envenenada por parte de su padre? De momento, las palabras de Thomas se quedan cortas en comparación con las demoladoras acusaciones que ha hecho su hermana Samantha.
'Es una psicópta y una narcisista': Samantha Markle destroza a su hermana
La hermana de Meghan, ha concedido una brutal entrevista al medio 'LOC', donde la ha llamado, entre otras cosas, 'psicópata' y 'naricisista'. Según ha contado Samantha Markle en exclusiva, la relación con su medio hermana se fue a pique justo antes de la boda real.
«Ni los Markle ni los Ragland fueron invitados porque entonces se habría sabido que Meghan había mentido a Harry y a la familia real. Ya sabes, si vas a una boda y bebes champán la gente habla y habla y entonces surge la verdad. Sentí que encubrir su propio engaño no era una razón válida para herir a tanta gente». Pero, ¿qué es lo que estaría tan desesperada por ocultar Meghan?
En palabras de su hermana «Si no está lidiando con la realidad necesita asesoramiento. Si cree que lo que piensa es real cuando en realidad tiene pensamientos delirantes pueden ocurrir muchas cosas». Además, no ha dudado en acusarla directamente de intentar destruirlos a ella y a su padre.
«Ella ha pagado a relaciones públicas para detruirnos. El daño ha sido público y Meghan debería disculparse públicamente, pero los psicópatas y narcisistas secundarios no son capaces de reformarse». Por otro lado, Samantha asegura que su hermana está manipulando a Harry y aprovechándose de la situación.
«Se aprovecha de unos problemas que Harry debería tratar con un psicólogo. La falta de juicio de Harry ha conllevado que perdiera a su familia y sus amigos, por tanto, tiene que aguantar a Meghan por sus hijos. Sin duda, ella le está controlando porque se encuentra entre la espada y la pared. Los Windsor deberían alejarle de mi hermana».
Y, por si no fuera suficiente, también ha declarado que no siente que la actitud de la duquesa de Sussex se parezca ni un ápice a la que tuvo Lady Di. «Diana no corría por ahí mintiendo a todo el mundo, demostró gran empatía por la gente que sufría y jamás habría permitido que apartaran a Harry de todo lo que amaba».