Si algo suelen tener todas las ediciones de Supervivientes, es que descubren para el gran público como son famosos quizá no tan conocidos. Uno de los grandes descubrimientos de esta edición de 2021 ha sido, sin duda, Palito Dominguín. Ya fuera del concurso, ha querido hablar un poco más de su vida y del momento más duros: la muerte de su hermana Bimba Bosé.
La joven se ha querido sincerar en una entrevista que ha concedido en exclusiva a la revista Lecturas. En ella, abre su corazón y relata cómo fue un auténtico varapalo que ha marcado a su familia para siempre. Y es que la cantante y modelo nos dejaba en 2017, muriendo a los 41 años a causa de un cáncer.
La hija de Lucía Dominguín cuenta como con su muerte se estableció una conexión entre ellas que no hubiera deseado. "Cuando yo nací Bimba tenía 21 años, y cuando ella falleció yo cumplí 21 también. Se cerró el ciclo", afirmaba Palito.
Durante toda la entrevista, no son pocas las muestras de amor hacía su hermana mayor. Pero también de dolor tras una pérdida que llegó demasiado pronto. Pese a ello, ella misma explica que durante estos más de 4 años ha tratado de reponerse al golpe más fuerte de su vida.
Así contaba en la revista cómo ha vivido desde que ocurrió esa tragedia: "Di un cambio drástico al fallecer mi hermana. Dije 'me niego a estar triste, a perder mi vida estando mal, enfadada'. Fue un hostión de la vida, o te vas para arriba o te hundes".
La muerte de su hermana Bimba la ha marcado de por vida
Y es que la exconcursante de Supervivientes reconocía que este hecho la hizo madurar antes de tiempo. Aunque es cierto que ella ya se había vuelto fuerte por los varapalos recibidos en la vida. "Tengo mucha fuerza mental, lo he pasado muy mal en mi vida y he tenido muy mal carácter, no sé cómo no lo he sacado. De pequeña me llamaban la 'morros', estaba siempre cabreada", afirmaba.
Seguramente, eso es lo que la ha ayudado a seguir adelante en el concurso de Telecinco. "Me he sentido muy mal, de tocar mucho ya el fondo del fondo, de decir 'o me impulso o me quedo aquí", seguía relatando al medio citado. En Honduras ha tenido mucho tiempo para poder pensar y recordar a Bimba.
Finalmente, confesaba el proceso vivido desde el fallecimiento de su hermana. Todo un vuelvo de sentimientos que ha ido variando con el paso del tiempo.
"Cuando mi hermana se puso enferma, me culpaba por no estar ahí, te fustigas mucho tiempo hasta que dices: 'Ya está'. De esto me he sanado, ha sido muy duro, pero hace no mucho me lo perdoné y perdoné al universo que se la haya llevado. He sentido mucha rabia, ahora siento amor y tristeza", sentenciaba.
Su familia indignada tras su eliminación de Supervivientes
La verdad es que la pequeña de los Dominguín se ha dado a conocer estas semanas que has estado en el reality de supervivencia. Con el paso de los días, se ha ido ganando el cariño del público que la tenía entre sus favoritas. Es por eso que fue una gran sorpresa su reciente expulsión.
Solo hay que ver la reacción de los espectadores en plató cuando regresó a España. Entró entre los vítores y aplauso, aunque se encontró con una sorpresa. Allí no estaban ni su novio ni su madre.
Pese a estar orgullosos de su paso por el programa, no están tan contentos con la dirección del mismo. Creían firmemente que su expulsión fue un auténtico "tongo". Es por eso que decidieron no acudir aquella noche.