Sin lugar a dudas, esta edición de 'Masterchef' está siendo la más polémica de toda su historia. Y es que han tenido lugar momentos que vienen a dejar patente que quizás ha perdido su esencia en tanto en cuanto se destaca más lo que es el 'mal rollo' entre algunos participantes que la cocina. Vamos, que va adquiriendo matiz de reality.
No obstante, asimismo también ha generado una gran controversia por lo sucedido con la ex concursante Saray, que se convirtió en ejemplo de mala educación y chabacanería. Y ahora el programa de La 1 vuelve a estar en el punto de mira. Tanto es así que algunos internautas consideran que quizás podría ser la última edición anónima del mismo.
Los tres instantes que ponen el concurso de cocina en la cuerda floja
La gala de anoche de 'Masterchef' fue muy intensa y acabó con la expulsión de Sara Lúa. No obstante, si por algo se caracterizó fue porque en ella se produjeron tres instantes que marcaron un hito del programa y que pueden haber provocado que 'esté cavando su tumba'. Nos estamos refiriendo a los siguientes:
1.Una concursante no puede cocinar por no tener productos para hacerlo
Ayer se produjo una de las pruebas más conocidas del programa: la del robo de alimentos de las cestas de los compañeros. Durante ese citado robo se pudo comprobar que hay concursantes que, más que en superarse a sí mismos y en demostrar sus dotes culinarias, están ahí para dar espectáculo y para conseguir su propósito 'pisando' a los demás.
Si decimos eso es porque la cesta de Teresa se quedó completamente vacía. Sus contrincantes no tuvieron piedad y le quitaron todos los productos. ¿Resultado? Que por primera vez en 'Masterchef' una participante se quedó sin poder cocinar.
2.La repesca se convierte en no repesca
En la gala de ayer, de igual modo, también se celebró la tradicional repesca que iba a permitir que uno de los ya expulsados pudiera volver a ponerse el delantal. Sin embargo, se produjo otro momento inesperado y que jamás había tenido lugar en el concurso: los jueces decidieron no darle una segunda oportunidad a nadie.
Jordi Cruz, Pepe Rodríguez y Samantha Vallejo-Nájera consideraron que la falta de entusiasmo de los ex concursantes en la prueba que tuvieron que hacer les había dejado claro que ninguno de esos merecía volver a las cocinas. Una decisión que dejó estupefactos a todos los presentes y a los telespectadores que consideraron que ese había sido un error garrafal del jurado.
3.Un nuevo concursante llega en la semana 7
Como no se había producido repesca, el programa decidió darle una oportunidad a alguien. En concreto, llegaron al plató cinco personas que habían hecho los castings y que se habían quedado a las puertas de entrar. Otro momento más que jamás se había producido en la historia del espacio.
Esa decisión sorprendió a los concursantes y enfadó enormemente a algunos, como sería el caso de Andy. Este se mostró maleducado, prepotente como siempre y dejando claro que no estaba de acuerdo con esa medida. Quizás no estaba de acuerdo porque puede ver peligrar su plaza en un momento en el que, por mucha verborrea que utilice, no acaba de convencer con sus habilidades culinarias.
A pesar de todo, el jurado siguió adelante con su postura y planteó una prueba donde los concursantes tuvieron que formar parejas con los aspirantes para cocinar juntos. Finalmente, ganó la formada por Andy y Carlos y este gaditano consiguió su delantal. Eso sí, 'juega' en clara desventaja porque sus contrincantes llevan siete semanas y han adquirido experiencia y conocimientos de los que él carece.
Sea como sea, por esos tres hechos insólitos en 'Masterchef' muchos de los seguidores del programa mostraron su malestar en redes sociales. Y lo hicieron con mensajes tales como «El programa pone las normas, pero las de este año son un cachondeo. Ya solo falta que decidan la final a cara o cruz» o «Son muchas las injusticias que hemos visto en esta edición».
Comentarios que vienen a dejar claro que a los espectadores no les está gustando el giro que está dando el concurso y eso puede ser el fin del mismo.