Mask Singer fue uno de los concursos que más aceptación tuvo por parte de la audiencia la temporada pasada. Este talent se emitió en Antena 3 y consistía en adivinar qué famoso se escondía bajo un disfraz al tiempo que demostraba sus dotes artísticas. Todo ello sin que se desvelara la identidad.
El jurado debía acertar que personaje se ocultaba detrás de la máscara, mientras que en sus hogares los espectadores también realizaban sus pronósticos. Por medio de unas pistas previas que daba en la presentación o por la canción escogida se podía conocer algo más de él.
Todo apuntaba a que Mask Singer era un programa muy inocente, sin ningún tipo de peligro. Pero se ha demostrado que no era así. En la versión estadounidense del formato, que emite la FOX, se vivió un momento muy tenso que obligó a detener la grabación.
Uno de los participantes en el concurso, Firefly (Mariposa), tuvo que parar la actuación de repente. Empezó a toser al tiempo que trataba de recuperar la voz. Pero la situación empezó a ser preocupante.
Al cabo de unos segundos, la participante comenzó a realizar unos gestos de asfixia reclamando ayuda. No podía respirar.
Hasta ese momento, todo iba de maravilla. La cantante demostraba sus dotes con un micrófono ante un jurado que no salía de su asombro por lo que estaba escuchando. Se habían quedado prendados por su voz.
Los gestos de aprobación dieron paso a los de preocupación en muy poco tiempo. La famosa que se ocultaba bajo el disfraz interrumpió la canción. Empezó a toser al tiempo que doblaba el cuerpo para favorecer la acción.
No podía respirar y para advertir de ello a los miembros del equipo se daba golpes en el pecho. El jurado se dio cuenta de la situación con rapidez.
No es habitual que en Mask Singer ocurran este tipo de percances, pero parecían estar preparados para ello. "¡Qué alguien suba allí!" o "¡Alguien tiene que ayudarla!" fueron algunas de las frases que se escucharon por su parte.
Uno de ellos, Ken Jeong, no se lo pensó dos veces y saltó al escenario corriendo. Además de actor y cómico también es médico. Comprobaron que lo más conveniente era quitarle la máscara, pero deberían hacerlo con cuidado de que no se destapara su identidad.
Varios componentes del programa rodearon a la enmascarada para que no se le viera el rostro. Se escuchó a alguien decir: "Vamos a quitarte la máscara". En ese momento decidían poner la pantalla en negro para dejar la intriga entre los espectadores.
Mask Singer, a punto de costarle la vida a un concursante
En Mask Singer decidieron dar paso a la publicidad para generar más expectación. A la vuelta, Nick Cannon se encargó de dar el parte sobre el estado de salud de la concursante a los seguidores del programa.
"Firefly tuvo que detener repentinamente su actuación. Ella está detrás del escenario en este momento siendo atendida por nuestro médico", informaba. Añadían que "su bienestar es nuestra principal prioridad" en estos instantes.
Sin embargo, la grabación no podía detenerse y el "espectáculo debe continuar". Siguió como si no hubiera ocurrido nada. Más tarde volverían a tranquilizar al público volviendo al escenario la concursante. "Es una gran luchadora", señalaban mientras se preparaba para volver a cantar de nuevo.
La famosa que se escondía bajo la máscara acabó la actuación y la puntuaron como la mejor de la noche en Mask Singer. Todo un éxito después de lo ocurrido y del miedo que se pasó en el estudio.