Leonor está siguiendo, como todo el mundo, el último adiós que se le está dando a la reina Isabel II. De ahí que, por ejemplo, haya visto la manera en la que su padre ha homenajeado a la fallecida públicamente. Todo esto la ha llevado a ser consciente de que el funeral de la monarca británica, que será el 19 de septiembre, traerá problemas a su familia.
Leonor sabe que al sepelio acudirán los Reyes y también los eméritos, lo que va a generar un interés nada positivo. Nos estamos refiriendo a que se desea encontrar la imagen del encuentro público de Felipe VI y Juan Carlos I, tras los escándalos del último. Por este motivo, ella quiere ante todo que dicha fotografía no sea tomada para que así no se ahonde más en los conflictos en el seno de la Familia Real.
Leonor descubre cómo se ha producido la controversia
La hija de Letizia conoce la forma en la que se ha originado la polémica por la asistencia de su abuelo al mencionado entierro. Ha sucedido cuando la Oficina de Asuntos Exteriores británica envió unas invitaciones para el sepelio a la Embajada de España en Reino Unido. Eran invitaciones para los actuales monarcas y para sus antecesores en el cargo.
Los padres de Leonor de inmediato confirmaron su presencia, pero no lo hizo Juan Carlos I. Este en un principio dijo que no acudiría. Entre otras cosas, no quería viajar hasta un país donde tiene un caso judicial abierto por un delito de presunto acoso y amenazas a Corinna Larsen, la que fue su amante.
Sin embargo, el abuelo de Leonor cambió de opinión. Lo hizo cuando escuchó a dirigentes socialistas, como Patxi López y Manuel Albares, hablar de su asistencia al sepelio. Le enfadó que dijeran que el representante de España iba a ser Felipe y que a la Casa Real no le gustaría que él asistiera.
Así, ahora ya está confirmado que a la última despedida a la reina Isabel II acudirán tanto los monarcas actuales como los eméritos.
Leonor, temerosa de la imagen más buscada
La hermana de la infanta Sofía sabe que la asistencia de sus cuatro familiares al funeral británico va a dar mucho de que hablar. Ha generado una enorme expectación y la prensa tiene la intención de captar la imagen más esperada. Nos estamos refiriendo a la que muestre juntos a los padres y abuelos de Leonor.
Esta instantánea supondría volver a verlos en el mismo lugar dos años después de la última vez que coincidieron en un acto público. Por tanto, existe mucho morbo por ser testigos de cómo se saludan, de cómo se comportan, de si hablan o no. Claro, porque no hay que olvidar que Felipe VI lleva tiempo intentando 'zafarse' de la sombra presuntamente 'corrupta' de su progenitor.
El medio Informalia ha publicado hoy que desde el Palacio de la Zarzuela se quiere evitar esta polémica imagen a toda costa. Por este motivo, se desvela que ha enviado una nota a la Casa Real británica con un objetivo. Con el de intentar que no sienten juntos en la Abadía de Westminster a los cuatro españoles.
Eso sí, parece que en dicho comunicado se deja de manifiesto que “lógicamente se adaptarán a los criterios protocolarios, las decisiones organizativas y las instrucciones logísticas que se adopten por parte de las autoridades responsables del acto”.