Kiko Rivera sorprendió a los espectadores de GH DÚO confesado que había padecido serios problemas con las drogas. Isabel Pantoja le dio la espalda cuando más lo necesitaba y fue Irene Rosales quien le ayudó a salir de aquel infierno.
Kiko Rivera prometió recuperarse al 100%, pues asumió que todavía seguía teniendo ciertos impulsos que podrían jugarle una mala pasada. Sofía Cristo, que ha atravesado una situación similar, se ofreció a ayudarle proporcionándole un buen tratamiento.
El marido de Irene Rosales eligió superar sus adicciones en silencio y no aceptó los medios que le proporcionó la hija de Bárbara Rey. Según ha salido publicado, prefiere tratarse desde su domicilio para no llamar la atención de la prensa.
Isabel Pantoja estuvo muy preocupada por él, aunque no supo demostrarle que podía contar con ella para todo lo que necesitara. La tonadillera se negó a que su pequeño del alma ingresara en un centro de desintoxicación, así que se ocupó en primera persona del conflicto.
Kiko aseguró que su madre únicamente se limitó a llevarle a una casa alejada de la presión mediática durante una temporada corta. Fue la antigua colaboradora de Viva la vida la que tuvo que ponerse al frente de la situación.
En las últimas horas, varios medios de comunicación se han hecho eco de una noticia bastante llamativa: el DJ podría volver a terapia. Lo cierto es que nunca se ha puesto en manos de profesionales, al menos de forma continuada.
Sofía Cristo confirmó en Sálvameque su compañero de batalla jamás asistió a la clínica, a pesar de que se comprometió públicamente a hacerlo. Un testigo anónimo habló en el programa sobre la posibilidad de que el andaluz hubiera recaído.
Kiko Rivera asegura que no ha vuelto a consumir desde que se prometió salir de aquel infierno. De hecho, está dispuesto a hacerse una analítica en directo para demostrar que ya no toma drogas.
Rivera e Irene Rosales piden ayuda a un terapeuta
Rivera ha dado un paso al frente para anular los rumores que circulan sobre su personaje público. Ha hablado con Hernández para que desmentir que haya tenido una recaída, aunque el periodista Gustavo González no confía en su palabra.
El paparazzi maneja datos suficientes para afirmar que Irene Rosales y su marido han pedido ayuda a un terapeuta experto en desintoxicación. Siguiendo esta información, los médicos le han recomendado al DJ que ingrese en un centro para cumplir con un buen tratamiento.
La batalla de los Pantoja podría ser el detonante para que dé un paso atrás, por lo que es importante que se aleje de la polémica. El hijo de Paquirri confesó en una ocasión que más de una vez había tenido la tentación de consumir para evadirse.
Isabel se mantiene firme y se niega a acercarse a su pequeño del alma por todo el daño que está haciendo dentro de Cantora. La artista le ha dado la espalda para centrarse en las únicas personas que siempre han sido fieles: su madre y su hermano.
La extertuliana de Emma García se está encargando de la recuperación de su pareja, aunque ha pedido refuerzos. Uno de sus familiares ha hablado con Gustavo González para asegurar que el matrimonio se ha puesto en manos de profesionales.
El periodista ha desvelado que el DJ podría ingresar en La Garriga, el mismo centro donde estuvo interna Carmina Ordóñez. El tratamiento es bastante caro, pero teniendo en cuenta el patrimonio que dice tener, no tendrá problemas para pagarlo.
La supuesta recaída llega en uno de los momentos más complicados para la familia. La nuera de Isabel niega que estén atravesando una crisis, aunque sí reconoce que han tenido que solventar muchas diferencias.
“Hemos tenido muchas discusiones: me he ido de casa, se ha ido él, nos hemos pasado muchos días sin hablar y nadie se ha enterado. Él me fue infiel y lo perdoné, pero no lo haré otra vez”.