Julián Muñoz, exnovio de Isabel Pantoja, ha protagonizado una serie en Telecinco que está dando mucho de qué hablar. Se llama No es la hora de la venganza, es la hora de la verdad y en muy poco tiempo se ha convertido en el producto más comentado de la televisión. El antiguo alcalde de Marbella ha desvelado que estuvo casado con la tonadillera y que intentaron tener hijos juntos.
Julián Muñoz asegura que se aprovechó de su condición de alcalde para firmar un papel que le convertía en pareja oficial de Isabel Pantoja. Pepi Valladares, antigua empleada de la cantante, ha dado veracidad a esta información, aunque reconoce que ella no era consciente de la misma. “Desconocía este documento, pero ella lo guarda todo porque tenía todas las cartas”, explica en Telecinco.
Julián ha afirmado que escribía todos los días a la artista sevillana porque estaba completamente enamorado de ella. “Me sentía como el tío más importante del mundo porque había conseguido que un personaje como Isabel se fijara en mí”, declara en el documental. Esta historia de amor fue tan estable que supuestamente decidieron darse el sí quiero, a pesar de que fue un acto íntimo.
La periodista Paloma García-Pelayo, autora de la entrevista, ha explicado que ningún medio sabía que Pantoja y Muñoz formalizaron su relación. “Es algo inédito porque no era un folio sin más, hicieron una pequeña ceremonia y lo llevaron a la virgen del Rocío”, desliza al respecto. El antiguo alcalde asegura que firmaron un folio oficial que incluso tenía validez legal.
La experta Rosa Villacastín es una de las colaboradoras de No es la hora de la venganza, es la hora de la verdad. Según su opinión, lo más llamativo es el cambio que ha experimentado la expareja de la tonadillera en los últimos meses. “A mí me ha resultado impactante ver a un hombre que tocó el cielo y que en muy poco tiempo se encontró en el infierno”, comenta la cronista.
Julián Muñoz intentó ser padre con Isabel
Julián ha sacado a la luz una información que nadie conocía: su relación con Isabel Pantoja era oficial y tenía validez legal. “Hicimos un papel como si nos hubiéramos casado porque yo era alcalde y firmé el documento, no sé donde está ni me importa”. Supuestamente esto sucedió en Marbella, en la mansión en la que residían de forma habitual.
El expolítico y la tonadillera han mantenido oculto este secreto durante mucho tiempo, pero Muñoz ha hecho examen de conciencia y está arrepentido. “Yo he sido un perro con la prensa”, comenta al recordar cómo fue su pasado en los medios de comunicación. Los periodistas descubrieron las intenciones de la pareja y ellos no supieron responder de una forma adecuada.
El protagonista del documental asegura que intentaron ser padres, algo que era un secreto a voces en la prensa del corazón. Visitaron una prestigiosa clínica e incluso estaban dispuestos a adoptar si no podían traer un bebé al mundo de forma biológica. “Hay cosas que no hace falta preguntar, pero era un deseo de ella más que de Julián”, explica Pepi Valladares, antigua amiga de Isabel.
Julián Muñoz sitúa a Isabel en el disparadero
Joaquín Prat, presentador del documental, aseguró nada más empezar el programa que la tonadillera iba a quedar completamente al descubierto. “Vamos a conocer si Isabel Pantoja fue víctima o verdugo de su historia de amor”, anunció el periodista. Lo más llamativo para él es que la pareja “redactó un documento en el que sellan su amor de por vida”.
La historia de amor entre Isabel y Julián fue un auténtico fracaso y terminó de la peor forma posible: con los dos en prisión. La estancia del expolítico en prisión, según cuenta él mismo, fue un auténtico infierno y allí se dio cuenta de que la cantante se estaba aprovechando de él. Los expertos piensan que uno se usó al otro porque los dos sacaron beneficio de la relación.