El entorno de la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarin todavía intenta asimilar la impactante noticia de su nueva relación.
Sin embargo, parece ser que ellos han tenido tiempo para digerir el asunto. Y buena prueba es la reacción que ha tenido uno de sus hijos, Pablo.
"Iñaki lo afronta con mucha tranquilidad, Pablo Urdangarin es muy natural y correcto, también con mucha normalidad, diciendo 'nos vamos a seguir queriendo", comentaban al respecto.
Sin embargo, también le reprochaban al exduque de Palma la forma en la que ha actuado. "Si quieres seguir en la clandestinidad, no te vas a la playa en el País Vasco francés".
Paloma García Pelayo confesaba que su información se basa en "las 24 o 48 horas antes de que se publicase la portada". "En las 24 horas anteriores a la publicación, ahí está la clave en la relación entre la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin".
La periodista explicaba que "el martes, en Zarzuela ya conocían y sabían de estas fotografías, las habían visto tanto en papel como en revista".
"En ese momento se desata una crisis en la familia, la infanta Cristina está en Ginebra, la llaman y se producen un 'shock' general, que efectivamente no conocen a esa persona".
Aunque este escándalo no habría afectado a la relación que mantienen la hija de los reyes y Urdangarin, que en general suele ser bastante buena.
"Sí sé que el matrimonio habla a diario, con normalidad; y ahora esto es aportación mía, entiendo que en el momento que la infanta conoce las imágenes hubo algún tipo de conversación y no demasiado sereno".
De esa forma, remarcan que las fotos "pueden no agradar pero no asombran". Y es que la Infanta Cristina ya lo sabía. Ahora mismo, a ella solo "le preocupan sus hijos".
La tensa conversación que mantuvo la Infanta Cristina con su padre
El propio exduque de Palma habría informado a su familia de que mantenía otra relación después de las vacaciones de verano.
Y, por su parte, "la infanta se lo comunicó a su padre cuando tuvo la constatación de que se habían hecho esas fotos, pero fue su hermana Elena quien se encargó de contárselo a su madre", según la información aportada en Ya es mediodía.
"El martes, horas antes de que se publicaran las imágenes, Doña Cristina tuvo una conversación telefónica con Juan Carlos y hablaron del tema".
"La Infanta está bien y está tranquila. Sus amigos más cercanos ya han hablado con ella, aunque no responde a la mayoría de llamadas. Para ella, la prioridad son sus cuatro hijos: Juan, Pablo, Miguel e Irene", aseguran.
"Estas cosas pasan y vamos a gestionarlo de la mejor manera posible", alegaba Iñaki en pleno ojo del huracán. "Lo gestionaremos con la máxima tranquilidad y juntos, como siempre hemos hecho".
Mientras que su novia, Ainhoa Armentia, estaría casada, aunque en trámites de separación, y con dos hijos. Ella, al contrario que Iñaki, se ha negado a hablar. Por otro lado, desde la Zarzuela no han movido ni un dedo a pesar de estar al tanto de la polémica. "Las tenían desde ayer y no desmintieron nada, solo dijeron no conocer a esta muchacha".
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"Ha sido una pillada que ha descolocado a todo el mundo", explicaba Pilar Eyre. Según la periodista, "los duques de Palma llevaban vidas separadas desde hace dos años. No había necesidad de que ella viviera en Ginebra y él en Vitoria, eso ya era una señal".
Buena prueba es que en los últimos años "siempre que se han dejado ver juntos, ha sido con sus hijos".
Sin embargo, "nunca aparecían ellos solos, como hubiera sido lo normal en un matrimonio que tiene buena relación". "Solo faltaba la foto que confirmase la ruptura", matizaba al respecto Eyre. Y apuntaba a que "podría salir más material".