En Supervivientes no solamente funcionan las tramas que tienen su origen en las islas hondureñas. Con el tiempo nos hemos dado cuenta de que en los platós en los que se realizan las galas del programa de aventuras. Nacen nuevas tramas y que también enganchan mucho a los espectadores.
Jorge Javier Vázquez y Carlos Sobera se han convertido en especialistas cuando toca dar protagonismo y sacar lo mejor de los colaboradores que les acompañan cada noche. En ocasiones no hay tanta actualidad en la isla como para rellenar tres o cuatro galas semanales y por ello. Es necesario apoyarse en cosas que ocurren en Madrid y concretamente en los platós de Mediaset.
Después de tantos años presentando los debates de los martes, es imposible que Carlos Sobera pueda ocultar cuál es su colaboradora fetiche y en la que se apoya constantemente. Su favorita no es otra que Oriana Marzoli. Concursante de realitys sin demasiado éxito, pero que se gana la vida comentando los concursos de los demás.
Si entramos a analizar que tal lo hace como comentarista, encontraríamos opiniones muy dispares. Pero lo cierto es que en los últimos tiempos se está popularizando por protagonizar momentos de dispersión durante los debates. Y que lejos de estar atenta a los temas que se tratan, dedica su tiempo a pintarse los labios o mirar el móvil.
Carlos Sobera acostumbra a reñirla cada vez que la pilla mirando el teléfono. Pues sabe que cada vez que le pregunte no sabrá que opinar porque no se está viendo los videos que se emiten para posteriormente comentarlos. Sin embargo, esta noche ha ocurrido algo y que ha dejado más que claro lo mucho que adora el presentador a su tertuliana.
El vasco ha aprovechado que Oriana ha acudido al programa acompañada de su novio Iván González y le ha preguntado que tal se llevaba con su cuñado. Ella ha afirmado que se llevan bien, pero que su cuñado es un niño. Sin embargo, se ha atrevido a afirmar que el niño está locamente enamorado de ella.
Un extremo que su novio no ha querido confirmar, pero que por suerte, ha sido apoyado por Carlos Sobera. El presentador ha dicho sin ningún tipo de temor que en España todo el mundo está enamorado de Oriana. Algo que deja entrever el favoritismo que tiene hacia ella y que le permite hacer cosas que al resto de tertulianos jamás se les permitiría.
Como por ejemplo hablar cuando no toca, interrumpir a los demás o utilizar el teléfono cuando la están sacando en plano. Lo más curioso es que Oriana solamente trabaja en el programa de Carlos Sobera y no en el resto de la cadena. Será que quizás su actitud solamente hace gracia a un grupo muy determinado de personas.
La audiencia ha hablado
Parece que el buen rollo que hay entre Sobera y Marzoli solamente existe en las inmediaciones de Mediaset. La audiencia ha hablado y parece que no les cae demasiado bien la colaboradora que resulta extremadamente pesada con sus intervenciones, mayoritariamente vacías de contenido interesante.
Son muchos los espectadores que no pueden con ella y que preferirían que fuese otro tertuliano o tertuliana el que ocupara ese asiento. El propio Jorge Javier Vázquez ha admitido en repetidas ocasiones que trabajar con Oriana no es nada fácil y que siempre que ha coincidido con ella ha podido ver como la joven se lo pone muy difícil al equipo del programa. Que ya no saben como tratar con ella y lograr un resultado óptimo en todas y cada una de sus comentadas intervenciones en televisión.