La sobrina de Isabel Pantoja no está pasando su mejor momento ni en lo personal ni tampoco en lo profesional. Si ayer era noticia porqué su prima Isa Pantoja había admitido en una revista que se avergonzaba de ella por algunas de sus actuaciones, ahora los problemas le crecen y afectan directamente a su principal fuente de ingresos, las colaboraciones que realiza semanalmente en el plató de 'Sálvame'.
La joven acudía hoy a su puesto de trabajo y coincidía con Kiko Hernández que afrontaba la tarde como presentador suplente, una tarea que lleva desempeñando hace años cuando hace falta cubrir a los presentadores titulares cuando se encuentran de vacaciones o se ausentan por temas personales. La relación entre ambos no es nada buena y esto ha propiciado que la tarde se le haya complicado a la joven más de la cuenta.
Kiko Hernández ha empezado atacándola, diciendo que si no se hablaba de su familia ella no habría boca en el programa y que se dedicaba a mandar mensajes de Whatsapp y de Instagram. Esto ha molestado mucho a la tertuliana que ha decidido declararse en huelga y ha indicado que no iba a abrir la boca en todo lo que quedaba de tarde. Ante esto, Kiko Hernández ha decidido seguir pinchándola y la trifulca ha acabado de la peor de las maneras.
Anabel pide a Kiko Hernández que deje de humillarla
La colaboradora se ha acabado cansando y ha decidido abandonar el plató del programa, sabiendo que esto podía repercutir a sus condiciones laborales y que incluso, podría acabar perdiendo su silla. En ese momento Lydia Lozano ha salido corriendo detrás de ella pidiéndole insistentemente que no se quitara el micrófono y que volviese a su puesto de trabajo.
Anabel ha acabado diciendo que no iba a permitir que este señor, Kiko Hernández siguiese metiéndose con ella y que mucho menos iba a pasar que siguiese hablando mal de los Pantoja. El encontronazo ha acabado con Anabel corriendo por los pasillos de Telecinco y detrás de ella un director del programa que ha intentado convencerla de que volviese sin demasiado éxito.