26 de junio. Esta es la fecha en la que los españoles podrán dejar de llevar la mascarilla en exteriores. El presidente del Gobierno había anunciado hacía poco la inminencia de esta decisión. Ahora lo acaba de hacer oficial. La decisión implica la eliminación del uso obligatorio de la mascarilla en la calle.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha participado esta mañana en el cierre del Cercle d'Economia en Cataluña. Ante los asistentes y los medios de comunicación, ha aprovechado para dar la noticia. No será necesario llevar cubrebocas por la calle, siempre que se respete la distancia de seguridad.
Esta era una demanada de una parte de la sociedad, de algunas autonomías y de un sector de expertos que creen que ya no es necesaria esta medida. Se basan en la bajada de la incidencia del virus y la constatación de que la mayoría de los contagios se producen en interiores.
Desde el acto que preside hoy en Barcelona, Sánchez ha anunciado lo que el Gobierno llevaba días sopesando: «Me gustaría empezar mi intervención haciendo un anuncio muy importante para los 47 millones de compatriotas en nuestro país».
A continuación ha informado que el jueves de la semana que viene se celebrará un Consejo de Ministros extraordinario en el que se formalizará la medida. «Vamos a proponer que no sea obligatoria la mascarilla en espacios libres desde el sábado 26 de junio», ha dicho de forma solemne.
En sus palabras, Sánchez ha querido transmitir optimismo y prudencia: «Como presidente, y con lo que hemos vivido durante estos 15 meses de pandemia, antes que optimista prefiero ser prudente. Y aún así, siendo prudentes, esta vez los optimistas van a acertar y puede ser que hasta se queden cortos».
El anuncio era inminente
Según había avanzado el propio Sánchez hace unos días, España espera llegar la semana que viene a los 15 millones de personas vacunadas con las dos dosis. Esto es una premisa básica para pensar en la relajación de algunas medidas sanitarias que llevan tiempo con nostros.
El presidente añadió que «en unas semanas el 50% de la población tendrá al menos una dosis, y tendremos a 15 millones de españoles con la pauta completa». A partir de aquí, el Gobierno planteó la posibilidad de eliminar el uso obligatorio de mascarilla en espacios exteriores.
El Gobierno de Pedro Sánchez acaba de anunciar por fin la fecha más esperada: el 26 de junio. A partir del sábado de la semana que viene ya no será necesario llevar la mascarilla por la calle. Es un paso más en la desescalada que el Gobierno lleva adelante con prudencia pero sin pausa.
La retirada de la obligatoriedad de la mascarilla en espacios exteriores ha generado una gran polémica dentro del mundo científico. Los expertos no se ponen de acuerdo. Algunos advierten del riesgo de relajar esta medida con un porcentaje aún insuficiente de vacunados. Otros, sin embargo, creen que ya no tiene ningún sentido.
El Gobierno había planteado esta posibilidad, y el propio Fernando Simón habló de principios de julio como fecha más factible. Algunas comunidades autónomas también habían pedido la retirada de la obligatoriedad para el 1 de julio. Finalmente, el Gobierno no esperará a que acabe este mes.
La decisión responde al buen avance de los datos epidemiológicos con la llegada del verano y las altas temperaturas. La incidencia acumulada va bajando día a día y la vacunación también toma ritmo de crucero. El Gobierno es optimista con las previsiones de cara al futuro, y por eso ha accedido a relajar esta medida.
Paso adelante en la desescalada
En los próximos días, la mayoría de comunidades autónomas abrirán también la mano con el ocio nocturno. En estas fechas empiezan a abrir las discotecas y locales de noche en muchos sitios de España. Finaliza así otra de las restricciones más duras durante el largo año de pandemia.
El cierre del ocio nocturno y la obligatoriedad de mascarilla tanto en interiores como en exteriores fueron dos de los grandes pilares de las restricciones en España. Con su eliminación se confirma la voluntad del Gobierno de acelerar el camino hacia la normalidad.
España sigue así la senda de otros países en Europa. Antes que los españoles, los franceses fueron los últimos en eliminar esta medida. Después de nuestro país quedarán otros lugares con la norma vigente, como Italia y Grecia.
Pero en la mayoría de los países del continente, la obligatoriedad de la mascarilla en exteriores ya ha desaparecido. Reino Unido, Bélgica, Portugal, Polonia y Alemenia son algunos de estos países. La vacunación está dando resultados, y Europa pone rumbo a la normalidad.