El Congreso de los Diputados aprobó este miércoles, 30 de junio, de forma definitiva, la ley de medidas de prevención y lucha contra el fraude fiscal. La nueva norma va a entrar en vigor en los próximos días o semanas, al día siguiente de su publicación en el BOE. Aunque no se ha concretado una fecha para su puesta en marcha, la aplicación del nuevo texto se prevé que sea inminente.
La nueva ley contra el fraude fiscal limita los pagos en efectivo a 1.000 euros
El objetivo de la nueva ley es mitigar el fraude fiscal en nuestro país e intentar reducir los efectos nocivos que tiene sobre la economía. A estos efectos, se recoge una nueva regla que, probablemente, es la que va a tener más alcance de la nueva ley. Se trata de la limitación de pagos en efectivo, ya sea a empresas o a profesionales.
Si bien hasta ahora se permitía el pago en efectivo de hasta 2.500 euros, ahora esta cifra va a quedar limitada a 1.000. Pero esta no es la única limitación de la nueva ley: también disminuye de 15.000 a 10.000 euros el pago en metálico de particulares con domicilio fiscal fuera de España. Con esta medida, nuestro país hace caso omiso a la advertencia emitida en 2019 por parte del Banco Central Europeo (BCE).
La institución bancaria continental ve una "posible repercusión adversa" en los pagos en efectivo de esta medida, que considera "desproporcionada". Ya en 2019, pidió al Gobierno —que en aquel entonces barajaba su aplicación— que frenara su puesta en marcha por el "serio riesgo" que supone para el euro. "Esta limitación dificulta la liquidación de operaciones legítimas usando el efectivo como medio de pago, por lo que pone en peligro el concepto de curso legal", afirmó el BCE.
Las otras medidas que acarrea la nueva ley aprobada definitivamente en el Congreso
Pero la nueva ley contra el fraude fiscal incluye otras novedades importantes más allá de la limitación del pago en efectivo. Una de ellas es la suspensión de los cambios en el impuesto de matriculación hasta que termine el presente año. El pasado enero se aplicó una nueva tarifa con un ajuste de emisiones que suponía un aumento del recibo en la mayoría de casos.
Con la entrada en vigor de la nueva ley, esta subida quedará suspendida, de modo que en lo que queda de 2021 se pagará lo mismo que el año pasado. Será desde el 1 de enero de 2022 cuando se pague de forma definitiva con el nuevo sistema.
También se incluye la prohibición de imponer periodos de amnistía fiscal en nuestro país. Cabe recordar que la última fue impulsada en 2012 por el ministro de Hacienda de la época, Cristóbal Montoro. En aquel momento, Hacienda recaudó 1.700 millones de euros de los más de 40.000 millones que fueron regularizados en nuestro país.
Más novedades: el umbral para aparecer en la lista de morosos que anualmente publica Hacienda será ahora de 600.000 euros. Hasta este momento, tan solo aparecían los que deben, como mínimo, 1 millón.
También se refuerza el control sobre las criptomonedas. A partir de ahora, y haciendo uso del modelo 720, los usuarios de estas monedas virtuales deberán informar de los saldos y titulares de las cuentas de que sean propietarios. Esta nueva norma incluye tanto las cuentas nacionales como las internacionales, y también será obligatorio declarar las operaciones de adquisición, transmisión, cobros, pagos, permuta y transferencia.
En definitiva, pues, la nueva ley acarrea una serie de novedades que todos los contribuyentes deberemos tener en cuenta. Se espera que, en breve, la nueva norma entre en vigor tras su aprobación definitiva ayer en el Congreso.