Esa es la hipótesis principal en la que trabaja la Unidad de Atestados de Tráfico de la Policía Municipal. Concretamente, se trataría del medicamento Alprazolam, que se usa para tratar los trastornos de ansiedad y de pánico, han indicado a Europa Press fuentes policiales. Para demostrarlo, le han hecho las pruebas de sangre oportunas.
El propio conductor, aturdido tras el arrollamiento, señaló a algunos de los presentes que ese mismo día había acudido al médico para tratarle problemas de depresión y ansiedad.
El prospecto de este fármaco indica que se debe evitar conducir vehículos u operar maquinaria hasta que el enfermo sepa cómo le afecta al organismo. El Alprazolam puede provocar efectos secundarios, como somnolencia, aturdimiento, dolor de cabeza, cansancio, mareos, irritabilidad, verborragia y dificultad para concentrarse, entre otros.
Los síntomas de sobredosis son somnolencia, confusión, problemas de coordinación y pérdida del conocimiento. Además, los adultos mayores de 65 años (el taxista tiene 68) deben recibir dosis bajas de porque es posible que ingestas más altas no tengan mayor eficacia y provoquen efectos secundarios graves.
Los agentes todavía no han concluido el informe. Tendrán que determinar qué dosis consumió y si su médico le había informado de que se trataba de un medicamento incompatible con la conducción profesional. Si él era consciente, podría ser acusado incluso de homicidio doloso, cuya pena máxima alcanza los 15 años, según ha apuntado hoy 'El Confidencial'.
Arrolló a 8 personas
Un atropello múltiple tuvo lugar el viernes en torno a las 23.30 horas en la calle Bravo Murillo. El conductor de un taxi perdió el control del vehículo a la altura del número 193, arrancó ocho metros de valla e irrumpió en una terraza en la que se encontraban varias personas, afectando a dos mesas y ocho personas.
Una de ellas, una mujer de 44 años, falleció en el acto. Además, una mujer de 42 años, una amiga que se encontraba junto a la persona fallecida, fue trasladada en estado grave al Hospital de La Paz por un traumatismo craneoencefálico.