El Defensor del Paciente ha explicado que un hombre ha denunciado al Hospital General Río Carrión de Palencia por una posible negligencia médica muy grave que le dejó sin voz. Según ha informado el 'Diario de Castilla y León', la víctima fue diagnosticada de cáncer de garganta y le dieron dos años de vida.
A raíz de ahí, el paciente recibió 33 sesiones de radioterapia y 3 de quimio, pero el médico que le atendía le comunicó que el cáncer no había remitido y que, si no se operaba, le quedarían como mucho dos años de vida. El hombre decidió someterse a esa intervención, en la que se le extrajeron las cuerdas vocales y la laringe, por lo que el hombre perdió su voz.
Durante el post-operatorio, tras realizarse los debidos análisis, los médicos se dieron cuenta de que el paciente no padecía cáncer de garganta, pero según ha informado la presidenta del Defensor del Paciente, Carmen Flores, desde el centro hospitalario no se dio ninguna explicación a los hechos.
Los denunciantes no se explican cómo los médicos no pudieron darse cuenta antes de las 3 sesiones de quimio y de las 33 sesiones de radioterapia, además de la operación, de que el paciente no padecía cáncer.
La víctima de la supuesta negligencia puso la denuncia el pasado 21 de octubre ante el Defensor del Paciente, que ya se ha puesto en contacto con el abogado de Castilla y León para estudiar el caso y llevar a cabo las acciones pertinentes.
Varios casos de negligencias en los hospitales de Castilla y León
Este caso no es el único que se ha producido en los últimos meses en el que se acusa a hospitales de la región castellanoleonesa de negligencia. Hace unos meses, el pasado mes de agosto, Lydia Sainz-Maza, una mujer de 48 años, murió de un tumor después de llevar meses intentando conseguir cita con el médico en el Centro de Salud de espinosa de los Monteros (Burgos). Cuando consiguió el diagnóstico ya era demasiado tarde.
Otro caso similar sucedió también en la provincia de Burgos. En este caso, Lidia, una paciente de 53 años, falleció como consecuencia de dos tumores para los que no consiguió cita presencial durante el confinamiento. En ambos casos, las familias denuncian que los centros sanitarios se han 'olvidado' del resto de patologías más allá del coronavirus.
El caso se repitió, esta vez en un hospital de Valladolid, con una paciente de 22 años. Lidia González, de Melgar de Fernamental (Burgos), estuvo dos meses esperando para conseguir hacerse las pruebas y que le indicaran un tratamiento, pero terminó falleciendo a causa de un tumor.