España vivió ayer la Nochevieja más extraña, la primera con el coronavirus. El protagonista de esta noticia no olvidará nunca la noche de ayer, por una razón más trágica: acudió a casa de un amigo para tomar las uvas y al llegar se encontró que estaba muerto. Se desconocen los motivos del fallecimiento, aunque no hay signos de violencia.
El suceso tuvo lugar en Beade, en la provincia de Ourense, Galicia. Un vigués fue a tomar las uvas a casa de un amigo y se quedó de piedra al descubrir su cadáver en el domicilio de la calle Castiñeira. Lo que más sorprende es que llevaba varios días muerto.
Según el primer análisis forense, el vecino de Beade, de 59 años, llevaba varios días fallecido. La persona que lo encontró dio la voz de alarma a los agentes de la Policía Local, a los que explicó que los dos amigos habían acordado el encuentro hace unos días. La sorpresa fue mayúscula cuando llegó y vio que su amigo estaba muerto.
Según relató, ambos habían acordado encontrarse para ver las campanadas. Quedaron de acuerdo en que el vecino de Vigo iría a casa de su amigo en Beade sobre la medianoche para cumplir con la tradición de Año Nuevo y tomar las uvas juntos. Desde entonces no habían vuelto a hablar. Al llegar ayer, entró en la casa y halló el cadáver de su amigo.
A las 00.16 llamó a la policía para contar que se había encontrado a su amigo muerto, y los forenses determinaron que llevaba varias jornadas fallecido. El cadáver no tenía signos de violencia, y la policía local confirmó que el hombre había muerto por causas naturales. La policía de Vigo recibió 28 llamadas de quejas por el ruido y música alta en fiestas familiares de sus vecinos en plena madrugada.
Noche tranquila en España
Además, la policía local de Vigo desalojó dos botellones en parques durante el toque de queda, y tuvieron que socorrer a dos personas que se autolesionaron y a otras dos con crisis de ansiedad. Hubo tres detenidos, uno por negarse a poner la mascarilla y dos por malos tratos. La Policía Local intervino de madrugada en una fiesta ilegal dentro de un pub.
También en Barcelona la Guardia Urbana ha tenido que intervenir en una fiesta ilegal en el vestíbulo de un edificio. Los agentes han denunciado esta noche a un grupo de diez personas que estaba celebrando la llegada del año nuevo. También se ha intervenido una fiesta con 22 personas en el interior de un karaoke El balance de la noche en la capital catalana ha sido positivo ya que no se han registrado incidentes importantes.
También ha sido una Nochevieja tranquila en la capital de España. En Madrid se ha registrado la mitad de incidencias que el año pasado y no se ha producido ningún suceso con heridos graves. Emergencias ha informado de 109 intervenciones durante la noche de ayer, ocho de ellas referentes a peleas y agresiones, y 8 por intoxicaciones etílicas.