La localidad guipuzcoana de Berastegi está de luto por la muerte de Fermín Caminos, un joven montañero de 26 años. Fermín perdió la vida el sábado en el pico de Aspe, en el Pirineo aragonés, el pasado sábado. Estaba haciendo montañismo y esquí con dos amigos cuando se precipitó de una altura de 350 metros.
El joven realizaba la ascensión al pico oscense por la helada cara norte con piolet y crampones. Se desconocen las causas por las que cayó, aunque todo apunta que resbaló al pisar una placa de hielo. La Guardia Civil de Huesca se hizo cargo del rescate y abrió una investigación para esclarecer los hechos.
El montañero accidentado estaba acompañado por dos amigos, vecinos de la misma localidad, cuando se produjo la caída. Fueron ellos quienes avisaron a emergencias al perderle de vista, sobre las 13:50 horas. Aseguraban haber perdido a su compañero sin saber el sitio por donde había caído.
Un rescate muy complicado
Equipos de rescate e intervención en montaña de la Guardia Civil de Jaca acudieron al lugar donde estaban los escaladores. Con el apoyo de un helicóptero de la Unidad Aérea iniciaron la búsqueda del joven desaparecido. En un primer momento fue imposible hallar a Fermín, y tuvieron que hacer varias pasadas por la zona.
Finalmente lo encontraron a 2.200 metros de altitud, y los especialistas del cuerpo bajaron hasta el lugar. Lo hicieron “con muchísima precaución” al estar la superficie muy helada, lo cual entrañaba un gran peligro. Con la ayuda de crampones llegaron hasta el joven, que yacía sin vida y no pudieron hacer nada por su vida.
Fermín presentaba “lesiones incompatibles con la vida” y procedieron a remontar el cadáver. Su cuerpo fue trasladado al tanatorio de Tolosa, en Berastegi, donde la trágica noticia se extendió con rapidez causando una gran consternación. “Ha sido un golpe muy duro”, expresó la alcaldesa de la localidad, Amaia Azkue.
Era el mayor de tres hermanos
Fermín era un joven muy conocido en Berastegi que participaba mucho en las actividades del pueblo. Lo definen como un referente de la montaña en su localidad, una persona muy alegre y activa. Amigos y familiares lloran una muerte inesperada que ha supuesto un golpe duro y muy traumático para todos.
La localidad ha decretado tres días de luto por la muerte de Fermín. Era organizador de la Negu trail que se celebra anualmente en la localidad de Tolosaldea. Ayer tenía planeado precisamente realizar el recorrido de la carrera, que ha quedado suspendida.
Fermín trabajaba en la planta de la compañía Irizar e-mobility en Aduna, y fue remero del Zarautz Arraun Elkartea y de la Donostiarra. Era el mayor de tres hermanos, y hace poco participó junto a su hermana en la maratón de montaña T3T de Tolosa.
Máxima alerta en el Pirineo aragonés
Su muerte se suma a la de otro escalador guipuzcoano en menos de 24 horas. Iban Carballes, de 29 años y vecino de Berrobi, perdió la vida ayer tras caer de 50 metros en el monte Balerdi, en Aralar. La Guardia Civil ha alertado sobre el riesgo por nieve en las montañas del Pirineo oscense.
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La bajada de las temperaturas ha provocado que la superficie helada se convierta en hielo con el riesgo de resbaladas. Por eso piden precaución “al progresar por este tipo de terreno así como el uso adecuado de material como crampones, piolet y casco”. En los últimos días se han producido varios accidentes muy graves.
La formación de placas de hielo en esa zona del Pirineo ha llevado a las autoridades a hacer un llamamiento. Piden evitar actividades de riesgo o la alta montaña, porque están ocurriendo accidentes graves incluso en las pistas de esquí. Esta semana se han registrado dos muertes en Astún.
El fallecimiento de Fermín Caminos cierra una semana trágica en el Pirineo aragonés. El miércoles, un joven de 19 años perdió la vida al caer por un barranco en Truchas. El viernes, un esquiador de 71 años murió al salirse de la pista y caer por un barranco, en la misma zona.