Ante la evolución del Coronavirus estas últimas semanas y su comportamiento con las medidas de desescalada, todas las previsiones de los científicos hasta hoy se están viendo desbordadas y se ven sustituidas por un nuevo escenario: El virus se debilitará durante el verano para volver en una segunda oleada, pero no en otoño, como se pensaba, sino en diciembre.
Las nuevas perspectivas llegan de un laboratorio italiano, en la Universidad de Brescia, donde el célebre virólogo Arnaldo Caruso ha conseguido aislar una variante del Coronavirus mucho más débil que la actual y que podría acabar imponiéndose.
Esto marca un antes y un después en la investigación sobre el SARS-CoV-2 porque, de alguna manera, apunta a que el virus se está debilitando para lograr sobrevivir en el organismo humano. Las observaciones tanto en el laboratorio como en pacientes llevan a este experto a concluir que «el virus ya no tiene el mismo poder destructivo que tenía antes».
En base a eso, su predicción es que el coronavirus logrará adaptarse y convertirse en un virus como la gripe, el sarampión o la varicela, que se debilitan durante unos meses y vuelven más fuerte en nuevas oleadas. Esto hace prever una segunda ola, pero no en otoño como estaba previsto, sino a partir de diciembre, «cuando vuelva el frío y se den las condiciones óptimas para que el virus tenga mucha carga viral y se transmita muy fácilmente».
Por eso ahora ya se está viendo una disminución de los síntomas en enfermos, incluso gente mayor que coge la enfermedad pero presenta síntomas muy leves. «Durante el verano, el virus circulará casi de forma asintomática», dice este médico, «pero volverá a coger fuerza con la llegada del invierno».
Sobre esta nueva variante más debilitada del virus, Caruso no descarta que con el tiempo se acabe imponiendo, pero para eso necesitará hacer muchas mutaciones. Esto es así porque los virus necesitan ser soportables para las personas si quieren sobrevivir largo tiempo, y con la agresividad que presentaba hasta ahora no podría durar mucho tiempo más.
Pero esta evolución será a largo plazo, y mientras tanto habrá una segunda ola, e incluso una tercera y una cuarta, cuando el virus recupere una mayor carga viral. Este experto cree que antes o después, en una segunda o tercera oleada, todos los jóvenes y las personas que están bien de salud se inmunizarán y serán resistentes al virus.
Resistiremos mucho mejor
La inmunidad de grupo permitirá proteger a los más vulnerables ya que, si circula poco, tiene muy pocas posibilidades de llegar a un anciano o una persona con patologías, dice este virólogo, y concluye que «si hay una vacuna, mucho mejor».
En cuanto a los tratamientos, es optimista, ya que «ahora contamos con fármacos, con terapias a base de anticuerpos, de plasma, de anticuerpos neutralizantes, así que podremos resistir mucho mejor las próximas oleadas del coronavirus».
Sobre cómo afectará el calor al coronavirus reconocer que hay mucha confusión, pero que eso es normal ante un virus nuevos que no sabemos cómo se comportará. No descarta que el hecho de que se haya debilitado se deba a factores climáticos, pero asegura no poder afirmarlo de forma contundente. De momento, su receta es estar atento y vigilantes y, sobre todo, proteger a los más débiles.