Pocas horas quedan para dejar atrás el horario de verano y meterse de lleno en el de invierno. Este fin de semana tendremos que retrasar una hora el reloj y los días parecerán desde ese momento más cortos, ya que anochecerá más pronto. La pregunta que se plantea ahora es cuándo y cómo tenemos que hacerlo exactamente, pero también por qué lo seguimos haciendo pese a la gran polémica en toda Europa sobre este tema.
El próximo domingo 25 de octubre se tiene que retrasar la hora de las 03:00 a las 02:00
El cambio de hora de 2020 se producirá en este caso durante la madrugada del próximo sábado 24 al domingo 25 de octubre. Habrá que retrasar los relojes una hora con lo que a las 03.00 serán las 02.00, mientras que en las Islas Canarias a las 02.00 será la 01.00. Con ello, ganaremos una hora de sueño.
Este cambio de hora se produce el último domingo de octubre de cada año y forma parte de la Directiva Europea 200/84CE que también establece la aplicación del horario de verano a finales de marzo. Esta normativa es de obligatoria aplicación en todos los países miembros de la UE y tiene como objetivo lograr un ahorro energético y aprovechar las horas de luz natural.
La Comisión Europea propuso terminar con esta práctica a partir de marzo de 2019
Esta medida supone además un claro beneficio para sectores como el transporte y las comunicaciones, para la seguridad vial, las condiciones de trabajo, la salud, el turismo y el ocio, según argumentaba la Comisión Europea allá por 1999.
Esta misma institución realizó en 2018 una consulta a todos los ciudadanos europeos en la que más del 80% de los 4,6 millones de personas que participaron se mostraron a favor de acabar con los cambios de hora. Con este resultado, la Comisión propuso terminar con esta práctica y que en marzo de 2019 se produjese el último cambio de hora. La falta de acuerdo entre los estados y de evaluaciones de impacto ha hecho que Europa retrase hasta 2021 la posible anulación del cambio horario.