Durante la crisis del Coronavirus, Carles Puigdemont no ha dejado de trabajar desde Bruselas para consolidar sus posiciones en medio del proceso de reordenación del espacio político en torno a la plataforma JxCat (Junts per Catalunya). La batalla definitiva ha llegado con un anuncio inesperado que puede cambiar por completo el futuro del independentismo catalán.
Y es que el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont prevé anunciar en breve su ruptura definitiva con PDeCAT (Partido Democrático de Cataluña) y la creación de un nuevo partido. Fuentes cercanas avanzan que el anuncio oficial podría tener lugar a finales de julio.
Con la nueva organización, Carles Puigdemont tendría vía libre para imponer su estrategia de confrontación directa y no violenta con el Estado, y librarse del lastre que suponen para él líderes como Marta Pascal, partidaria del apaciguamento. La última declaración de intenciones de Puigdemont fue ayer mismo en su cuenta de Instagram.
«No nos autoengañemos» decía su mensaje, «tanto si somos el 47% como si somos el 55%, y lo seremos, la pared que tendremos delante será la misma. No hay ninguna vía hacia la independencia que pase porque el Estado lo permita». Por eso propone: «Iremos hacia la confrontación no violenta con el Estado. Y para eso nos tenemos que preparar».
Un mensaje que suena a avanzadilla del anuncio de creación de su nuevo partido. Por su lado, el exconsejero de Cultura Lluís Puig ha advertido desde Bruselas que las posiciones entre JxCat y PDeCAT para la reordenación del espacio se están enrocando.
En una entrevista para El Punt Avui que recoge Europa Press, el exconsejero, persona muy cercana al expresidente que comparte estancia con él en Bruselas, afirma que tras dos años y medio no se ha logrado el encaje entre las dos formaciones. Su información confirma que las relaciones están rotas y que el entorno de Puigdemont va hacia un nuevo partido.
Independentismo radical
El exconsejero Puig ha sido elocuente: «Ya no queda más tiempo». En relación a esto, ha admitido que JxCat va hacia la ruptura y que al no lograr sincronizar los discursos de las dos fuerzas, Puigdemont y su entorno estaría buscando una nueva plataforma.
Esto acabaría con años de tensiones internas dentro del espacio independentista representado por la antigua Convergència i Unió. El propio Lluís Puig ha reconocido que JxCAt nació «precipitadamente» para concurrir a las elecciones del 21 de diciembre de 2017, en las que fue la fuerza independentista más votada. Pero desde entonces, el cisma entre los partidarios de la confrontación con el Estado y los de la negociación no ha hecho más que crecer.
Aún no se conocen las siglas ni el programa del nuevo partido de Carles Puigdemont, pero a tenor de sus últimas publicaciones en redes sociales, es previsible que plantee la estrategia más radical del independentismo y prepare lo que se viene anunciando desde hace meses y que representa el objetivo último de Puigdemont: su regreso a España.