José Antonio Canales Rivera en un momento de Secret Story

José Antonio Canales desata la crisis familiar con su trampa con el testamento del abuelo

José Antonio Canales Rivera ha confesado su trampa cuando falleció su abuelo. Su familia no lo sabía y ahora puede haber consecuencias.

José Antonio Canales Rivera forma parte del reality Secret Story y estos últimos días ha adquirido mucho más protagonismo del que es habitual. El motivo no es otro que la confesión que ha hecho en directo sobre un tema que ha levantado ampollas en su familia.

Ni corto ni perezoso (aunque visiblemente emocionado) José Antonio Canales confesaba que cambió el testamento de su abuelo sin que él lo supiera. Cómo lo lees.

Antes de seguir, para ubicarnos bien en la saga familiar, hagamos un rápido repaso familiar tipo quién es quién y así no nos perdemos.

Antonio Rivera, el abuelo del miembro de Secret Story, tuvo cuatro hijos: Paquirri, Teresa, Antonio y José (Riverita). Paquirri es el padre de Kiko, Fran y Cayetano Rivera. Teresa es la madre de José Antonio Canales. 

Volviendo a la trama, José Antonio se rompía al recordar que su abuelo quería "dejárselo todo a él". "Siempre me decía: «con lo que yo tengo no tienes que torear más».

José Antonio decidió, en el último momento cambiar su nombre por el de su madre, Teresa Rivera.  "Si era la que iba a estar con él y a cuidarlo sin esperar nada a cambio...", explicaba el diestro.

La confesión de José Antonio durante la línea de la vida que los concursantes pasan en el reality, enmudeció a la audiencia. También a la madre de José Antonio, Teresa Rivera, que seguía las palabras de su hija desde una sala en el mismo plató.

Tras los emocionantes momentos vividos, José Antonio se reencontraba con su madre y se fundían en un abrazo. Esta visita inesperada ha dado fuerzas a José Antonio Canales para seguir en Secret Story y luchar por la victoria.

La herencia envenenada de Canales Rivera

Esta confesión puede volver a dividir a la familia de Paquirri y a reabrir heridas del pasado.

Ya en su momento, Riverita, el hermano de Paquirri y de Teresa Rivera se quejó de la decisión de su padre de dárselo todo a su nieto, el miembro de Secret Story.

Riverita falleció este 2021 por lo que ya no puede pronunciarse sobre el cambiazo de José Antonio a favor de su madre. A tenor de las protestas públicas que efectuó en su momento, seguro que no le hubiese sentado bien esta trampa de su sobrino.

A pesar de ello, Riverita también tuvo un gesto que descolocó a muchos tras su muerte. Y es que también él convirtió en heredero universal a su sobrino y aspirante a ganar Secret Story.

Tras cambiar el testamento varias veces, finalmente  el tío de José Antonio (y de Fran, Cayetano y Kiko Rivera) optó por designar único heredero al amante de Cynthia Martínez. En este caso, heredó varios terrenos y una casa en Barbate.

Su otro tío, Antonio aseguraba que Riverita también había dejado algo de su herencia a otras personas. No obstante, lamentaba no tener él la casa de Barbate y que fuera otra vez José Antonio el gran beneficiado con el patrimonio familiar.

Canales Rivera y la fría relación con sus primos Fran y Cayetano

José Antonio Rivera que ya no torea, vive sin problemas económicos gracias a la herencia familiar y a sus intervenciones en televisión.

El cambio de testamento ahora desvelado (se produjo hace 12 años y de ser ilegal, ya habría prescrito) es un obstáculo más para la buena relación entre él y sus primos.

La relación entre José Antonio, Fran y Cayetano no ha sido nunca excelente. Riñas familiares y problemas con la herencia de Paquirri siempre les han mantenido distanciados y durante muchas épocas, peleados. Con Kiko Rivera la relación era inexistente hasta hace muy poco. 

Isabel Pantoja mantuvo a su hijo aislado de la familia paterna y Kiko y José Antonio hace muy poco tiempo que han retomado una relación cordial. A pesar de esto, José Antonio sorprendía con otro titular en el reality de Telecinco: "Ya he perdonado a Isabel Pantoja".

A pesar de ser un hombre serio y algo soso, Canales Rivera acaba de reabrir un melón familiar que puede darle muchas más horas de televisión.