Cada cierto tiempo la Agencia Tributaria suele hacer público el listado de personas o empresas que adeudan más de un millón de euros al fisco. Entre ellos destaca un nombre. El empresario Agapito García, que tiene pendiente de pago 15 millones de euros.
En total son 4.028 deudores, que entre todos ellos acumulan más de 14.100 millones. En esta clasificación se encuentran personajes muy famosos, entre los que están, por ejemplo, el exministro Rodrigo Rato o Mario Conde.
Tampoco falta gente del mundo del deporte como el exmotociclista Sito Pons o la presentadora de televisión Patricia Conde. Muchos de ellos, viejos conocidos que llevan varios en la lista.
Pero, sin lugar a dudas, el encargado de liderar este ranking de deuda con Hacienda es Agapito García. Para muchos, un personaje prácticamente desconocido y al que cuesta ponerle cara. Su deuda alcanza los 15,97 millones de euros.
Aunque sorprenda la cifra por elevada, hay que decir a su favor, que redujo el dinero que debe en los últimos años. Respecto a la última lista, ha disminuido la deuda en un millón, y en casi diez respecto a 2015, cuando tenía pendiente de pago más de 26 millones.
La gran pregunta que se hacen muchos, es cómo se puede llegar a deber tanto dinero. El origen de todo esto se remonta a 1989. En ese año, Agapito García vendió cuatro compañías de fabricación de hormigón y materiales de construcción.
Los compradores fueron el grupo británico Steetley, que pagaron por la operación 22,7 millones. Y ahí es cuando empieza el verdadero problema para el empresario.
Con ese dinero empieza a hacer una serie de inversiones que no le salen del todo bien. Es nombrado vicepresidente de la compañía de custodia de valores Bancoval, donde adquiere la mitad de las acciones. También participa en el corredor de bolsa de Banco Madrid, filial española de Banca Privada d'Andorra.
Esta entidad acabó siendo intervenida por el Banco de España en marzo. También ha realizado inversiones en el mundo de las bodegas, con presencia en Garcigrande e Hispanobodegas.
Detrás de todas estas operaciones ha estado casi siempre la Agencia Tributaria, que ha vigilado al detalle cada paso de Agapito García. Sobre todo, en la venta con Steetley.
Sostienen que había empleado una sociedad instrumental para pagar menos impuestos. En concreto, solo el 13%, cuando lo normal, por ley, le habría correspondido abonar el 56%. A partir de ahí se originó un conflicto entre las dos partes, que va camino de eternizarse.
Ya van casi 25 años de lucha en los tribunales, y parece que el enfrentamiento va para largo.
Deuda de 20 millones en 1990
Hacienda le reclamó 20 millones de euros en 1990. En esa cantidad se recogía el capital que el fisco entendía que el empresario había eludido, pero también una multa que ascendía al 70%. Sin lugar a dudas, un duro golpe para las cuentas de Agapito García.
En aquel instante se negó a abonar dicha cifra, y a partir de ahí la Agencia Tributaria activó el proceso jurídico. La vía judicial se agotó en 2002, cuando la Audiencia Provincial le absolvió del delito fiscal.
Sin embargo, el proceso no se detuvo ahí. Llegó hasta el Tribunal Supremo, que acabaría fallando a favor del fisco en 2012. Este órgano decidió que el empresario debía asumir una deuda de 31,7 millones.
A partir de ahí, se optó por congelarle las cuentas. Se veía como la única manera para disminuir el dinero que debe. En cualquier caso, quedó claro que la medida resultó bastante buena.
Se ha comprobado como cada año ha ido bajando la cifra adeudada. De los más de 26 millones que tenía pendientes con Hacienda en 2015 se ha pasado a los casi 16 de este.